Uno de cada tres extremeños con derecho a prestación por la ley de dependencia, 10.699, estaba en lista de espera al cierre del año 2016 a pesar de que el número de personas atendidas creció casi un diez por ciento.
Así se recoge en el último dictamen del Observatorio de la Dependencia, de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, que detalla el crecimiento en solicitudes (3,12 %), personas valoradas (0,42), personas con derecho (2,47) y atendidos (9,89) el año pasado.
El número de solicitudes a 31 de diciembre de 2016 se elevó a 52.391, el de valoradas a 46.966, el de personas con derecho a prestación a 35.134 y el de atendidas a 24.435, según el informe, que califica con un aprobado de un cinco la aplicación de la ley en Extremadura.
Atención de servicios
La opción mayoritaria de atención ha sido la de los servicios, que ha crecido un 12,44 por ciento hasta alcanzar a 18.657 personas, por encima de la prestación económica por cuidado familiar, que ha bajado un 3,49 (7.054 atendidos).
Según el informe Extremadura mantiene el “grave lastre” del escaso desarrollo de una red pública de servicios sociales coordinada (local-autonómica) y presenta una utilización mínima de los servicios de proximidad.
La generación de empleo por millón de gasto público (44) es la segunda más alta en la región y ha hecho que en el último año se hayan creado mil empleos directos en el sistema de atención de la dependencia, además de un retorno de 63,9 millones.
En 2016 el recorte del Gobierno de España a raíz del Decreto Ley 20/2020 supuso que Extremadura recibiera 15,6 millones menos, con los que se hubiera podido atender a 2.638 personas más y crear otros 693 empleos directos. El Estado aporta sólo el 23 por ciento de la financiación pública y el 77 restante lo sufraga la región.