Manuel Casado: “Es legítimo el nombre Don Benito-Villanueva, es diferente y diferenciador”

24 horas después de que la comisión de expertos hiciera públicos los nombres finalistas para el nuevo municipio resultante de la fusión Don Benito y Villanueva, eldiario.es Extremadura habla con uno de los expertos que ha participado en ella durante los últimos meses, el lingüista Manuel Casado.

Rotundo, asegura que, con las actas de los plenos municipales en la mano y atendiendo a lo que en ellas literalmente se expresa, “es totalmente legítima la denominación Don Benito-Villanueva”. Y lo es, explica, porque es “un nombre diferente y diferenciador de las actuales denominaciones” que era una de las directrices que se marcaban en ese pleno extraordinario en el que se creaban tanto los grupos de trabajo para el proceso de fusión como la citada comisión de expertos.

La otra directriz era que sus miembros debían “buscar elementos comunes de arraigo” que representaran a los vecinos de ambas localidades y “personalmente, pienso que no se ha tenido en cuenta”.

El lingüista dombenitense subraya que la unión de ambos municipios es una buenísima noticia pero que el tema del nombre “es un tema muy sensible”. “No hay más que echar un vistazo a algunas de las encuestas en los principales medios regionales para ver lo que está sucediendo”, comenta.

Casado, catedrático emérito de Lengua española en la Universidad de Navarra y académico correspondiente de la Real Academia Española, insiste en que, en cuestiones tan decisivas como esta, “una cosa es lo que se quiere decir y otra distinta lo que se dice realmente” y el enunciado de las actas es ambiguo en lo que se refiere a descartar la denominación Don Benito-Villanueva por lo que reitera que “es legítima la interpretación que hace posible este nuevo topónimo”.

En este sentido, defiende, que en esta denominación sí hay arraigo, además, ya que es la que se utiliza, por ejemplo, para denominar el área de salud de la zona, conocida como Don Benito- Villanueva, o el nombre del propio hospital que ambas localidades comparten desde los años 70.

También habría que atender a los “precedentes de otras uniones como la de Peñarroya-Pueblonuevo, Oza-Cesuras o Cerdedo y Cotobade” para ver qué se ha hecho y cómo. Y, por supuesto, “al sentido común”, concluye Casado.