La Audiencia Provincial de A Coruña había previsto deliberar este viernes, 11 de octubre, sobre los recursos interpuestos por las partes al cierre de la instrucción judicial del caso Angrois, último paso antes de que los hechos vayan a juicio. Pero el escrito registrado apenas veinticuatro horas antes por la Plataforma Víctimas Alvia 04155 con la declaración jurada de un exmecánico de la empresa Talgo acaba de provocar que el tribunal modifique su guión y retrase su deliberación.
En esa declaración, revelada por las víctimas, el operario relata que revisó en Madrid el tren accidentado pocas horas antes del descarrilamiento en el que murieron 80 personas y otras 144 resultaron heridas. Siempre según su relato, en esa revisión detectó “diferentes averías” que dejó reflejadas en el sistema informático empleado con esa finalidad. No obstante, afirma, apenas “media hora” después del accidente en Santiago de Compostela, “varios directivos dieron la orden taxativa de borrar” esos datos del sistema y así se hizo.
Poco después de que las víctimas trasladaran al juzgado que instruye el caso esa declaración jurada junto con un escrito en el que reclamaban que el juez interrogue al operario y a los directivos señalados por él, Talgo respondía. La compañía “niega absolutamente la veracidad” de las acusaciones, afirma que ese borrado es “técnicamente imposible” y anuncia acciones legales contra el mecánico que, subrayan, fue despedido en mayo de 2018.
Este es el escenario en el que la Audiencia coruñesa tenía que deliberar sobre los recursos contra el cierre de la instrucción. Sobre su mesa se presentó una solicitud formal de la representación legal de la plataforma de víctimas, en la que solicitaban la “suspensión” de ese acto, según confirman fuentes judiciales.
En una providencia datada en este mismo 11 de octubre, el presidente de la sala, Ángel Pantín, frena el proceso “ante la eventual relevancia del hecho de nueva noticia” aportado por las víctimas, la denuncia del mecánico, y da a las partes “tres días” para que fijen posición al respecto. En cuanto las partes cumplimenten este trámite, la Audiencia decidirá.
A la disyuntiva sobre mantener o no al maquinista y al exjefe de Seguridad de Adif como únicos acusados se añade ahora otra cuestión: aceptar el cierre de la instrucción o bien, como ya había sucedido en mayo de 2016, ordenar reabrirla para realizar nuevas diligencias de investigación. Para la plataforma de víctimas, a las nuevas pesquisas que reclaman se tendría que añadir ahora el interrogatorio al exmecánico de Talgo y a los directivos que señala.
En su decisión la Audiencia ponderará las peticiones de las partes, el escrito con la declaración del mecánico y la propia documentación del sumario. En ella constan peritajes del tren tras el accidente aportadas por las partes y en ellas no constan defectos o averías que fueran consideradas relevantes como causa del accidente. Durante el proceso el foco ha estado puesto en las condiciones de seguridad en la línea, en presuntas deficiencias en la evaluación de riesgos en esta, en el exceso de velocidad y en el despiste del maquinista.