El colegio Compañía de María de Santiago de Compostela, una institución religiosa concertada, tiene abierta una investigación interna tras ser denunciado un trabajador del centro por abusos sexuales a un menor. La dirección asegura en una comunicación a las familias que tuvo conocimiento del caso cuando informó de ello el juzgado que instruye la denuncia, el pasado día 15 de diciembre, y que desde entonces ha apartado al empleado y le ha prohibido ir a las instalaciones y tener contacto con el alumnado.
El centro manifiesta en su escrito a las familias que ha activado el protocolo de actuación previsto y afirma que ha puesto en marcha medidas cautelares para “garantizar la seguridad de todo el alumnado”. Sobre la denuncia indica, según recoge Europa Press, que no tienen “más información concreta sobre los hechos ni ninguna denuncia previa”.
La dirección manifiesta que está “a disposición” de la familia del menor y de las autoridades judiciales y administrativas competentes para esclarecer los hechos. Su objetivo, dice, es aclarar lo ocurrido y “detectar si se pudieron haber producido otras situaciones que supusieran un riesgo para la integridad física y moral de cualquier menor”.
El mismo día que el centro conoció la denuncia, agrega, fueron informados el claustro y el servicio de Inspección Educativa. El viernes se informó al ANPA y se realizó una reunión presencial con las familias del alumnado de Infantil y de Primaria, indica.
El colegio asegura que comparecerá en el proceso “para proteger el interés del menor”. “Compartimos el dolor que esta situación genera y, convencidas como estamos de los principios y valores de nuestro proyecto educativo, sentimos profundamente que este tipo de hechos se pudiesen haber producido en nuestro centro. Al mismo tiempo, pedimos que se preserve la intimidad de los menores y de la familia afectada, y que se respete escrupulosamente el derecho a la presunción de inocencia”, añade el escrito.
El alcalde de la ciudad, el socialista Xosé Sánchez Bugallo, ha pedido prudencia respecto a la denuncia de abusos sexuales a un menor. El Ayuntamiento, dijo, conoce los hechos a través de la denuncia presentada ante la Policía. Ha señalado que psicólogos harán una valoración. “Yo no tengo conocimiento de que existan pruebas materiales ni testigos”, continuó. “Si un niño de esa edad recibió daños, me parece una tragedia y me parece algo terrible, pero, si fuera un error, también me parecería un problema terrible. Vamos a esperar”, añadió el regidor.