La Federación Ecoloxista Galega ha solicitado a la Dirección Xeral de Patrimonio Natural que trabaje para erradicar una nueva planta invasora conocida como jengibre del Himalaya. Se encuentra, asegura, en las primeras fases de establecimiento en territorio gallego y su erradicación todavía “resulta fácil”. Pero avisa de que ya se ha encontrado en varios municipios del litoral y en espacios protegidos como el Parque Nacional das Illas Atlánticas y las inmediaciones de las Fragas do Eume.
La planta, el Hedychium gardnerianum, es una especie “muy peligrosa por su capacidad de adaptación a diferentes condiciones ambientales” y por la rapidez de crecimiento y de expansión, con la que desplaza a otras especies autóctonas, señala la federación. Es conocida también con otros nombres, como falso jengibre, jengibre blanco, jengibre hawaiano, edichio o kahili.
En el momento en el que se publicó, en 2012, el plan estratégico de las especies exóticas invasoras en Galicia, ya había ejemplares de la especie en territorio gallego, dice la asociación, que recuerda que, al estar considerada oficialmente como especie invasora, esta planta no se puede introducir en el medio natural ni se puede poseer, transportar o comerciar con ella. En la actualidad, está comprobada su presencia naturalizada en al menos una veintena de municipios: Cedeira, Cariño, Ortigueira, Pontedeume, Valdoviño, Corcubión, Miño, Sada, Carnota, Cee, A Coruña, Muros, Malpica, Ribeira y Porto do Son en la provincia de A Coruña; Poio, Covelo, Gondomar, Redondela y Bueu en la de Pontevedra; y Foz y Viveiro en la de Lugo.
Los ecologistas solicitan que se actúe para evitar el establecimiento del jengibre del Himalaya. Propone una eliminación manual de los ejemplares naturalizados, establecer medidas de control para retirar los ejemplares que haya en parques, jardines y espacios públicos o privados y realizar campañas de educación ambiental para evitar que se planten en terrenos de particulares.