Las asambleas de conductores de autobús convocadas este martes en las principales estaciones de Galicia decidieron de manera masiva ampliar la huelga que desde hace dos semanas venían manteniendo los martes y miércoles a todos los días de la semana a partir del jueves día 13 de este mes de julio. Esto es, la huelga será continua a partir del próximo martes día 11. Así lo acordaron a pesar de los avances que los propios sindicatos admiten que se están produciendo en su negociación con la Xunta, pero mientras la patronal considera que por su parte aún está “muy lejos” un acuerdo.
Los sindicatos CIG, CCOO y UGT iniciaron la huelga de conductores de autobús, que está afectando de manera mayoritaria a todo tipo de servicios (urbanos, interurbanos, escolares o discrecionales, con incumplimiento de servicios mínimos), el pasado martes día 20 de junio. La convocaron para reclamar a la patronal la actualización del convenio colectivo y a la Xunta que replantee su nuevo modelo de transporte para el rural, dos elementos que acabaron relacionándose entre sí. Los trabajadores dicen que el plan de la Xunta para integrar las líneas de transporte escolar con las regulares supondrá una reducción de servicios y, con ellos, de empresas y empleos. Eso mismo es lo que considera la patronal, que añade a manera de pescadilla que se muerde la cola que la indefinición sobre lo que les supondrá ese plan a las empresas impide que puedan mejorar las condiciones de los trabajadores. Una coincidencia en el objetivo final de patronal y sindicatos, el de hacer que la Xunta rectifique su plan, que hace que el Gobierno gallego sospeche que la huelga esté siendo un paro patronal encubierto e intente dividir, de momento sin éxito, a trabajadores y empresarios.
Este lunes, tras una nueva reunión de los sindicatos con la Xunta, las dos partes destacaron que se seguían produciendo avances en la concreción por parte del Gobierno gallego de la subrogación de los trabajadores actuales por parte de las empresas que resulten adjudicatarias del nuevo modelo de transporte, algo que no estaba reflejado expresamente en el plan inicial. Y este martes el Gobierno gallego hizo pública la cláusula que introducirá en los nuevos contratos de transporte para reflejar por escrito esa subrogación. Sin embargo, los sindicatos dicen que esa subrogación no garantiza nada si el nuevo modelo de transporte no es rentable para las empresas adjudicatarias, ya que estas acabarían realizando despidos. Y en eso vuelven a coincidir con los empresarios, que este lunes veían “aún muy lejos” su acuerdo con la Xunta si ésta no les garantiza unos ingresos mínimos con el nuevo sistema. Este martes, en una nueva prueba de que no les cuesta llegar a acuerdos, sindicatos y patronal firmaron, en la sede del Consejo Gallego de Relaciones Laborales, la constitución de una “mesa gallega del sector del transporte de viajeros con el objetivo de conseguir un acuerdo marco gallego del sector” que incluya una “subida de las tablas salariales” de los convenios del transporte y la “actualización de las cláusulas de subrogación de las personas trabajadoras”. Esa mesa tendrá su primera reunión este jueves día 6.
Esto es, sindicatos y Xunta por una parte, y sindicatos y patronal por otra, avanzan en acuerdos por escrito, lo que no impide que la huelga sea ampliada y que las empresas sigan sin ver garantizado su beneficio económico. Mientras, la consejera de Infraestructuras, Ethel Vázquez, insiste en que su plan, ahora ya distinto del inicial, es el único viable para garantizar los puestos de trabajo y el transporte en el rural.