“Un error”. Los titulares de múltiples medios de comunicación se han llenado a lo largo de la mañana de este miércoles con el nombre del presidente de la Xunta. Alberto Núñez Feijóo ha sido uno de los primeros invitados del nuevo programa de las mañanas de la emisora Onda Cero y, en respuesta al periodista Carlos Alsina, admitió “errores” en la financiación del PP a lo largo del tiempo. La noticia impactó de lleno en la agenda informativa estatal por llegar en plena crisis interna de los conservadores y mientras siguen en marcha los procesos judiciales por la trama Gürtel y el caso de la 'caja B' del partido, en el que el juez Pablo Ruz da por demostrado que los populares se beneficiaron de fondos llegados por canales ilícitos. No obstante, las declaraciones se produjeron también menos de 24 horas después de que el PP se negara a que Feijóo compareciera en el Parlamento de Galicia para rendir cuentas, precisamente, sobre la financiación de su partido.
En la jornada del martes los populares hicieron valer su mayoría absoluta en la Junta de Portavoces de la Cámara gallega para tumbar la solicitud formulada por el PSdeG para que Feijóo compareciese sobre “los hechos recogidos en el auto del juez Ruz en el que se refiere a la financiación del Partido Popular de Galicia y al papel” que tuvo en él Pablo Crespo, ex secretario de organización del PPdeG y presunto número dos del entramado de la Gürtel. Para los socialistas las conclusiones de Ruz “ponen en tela de juicio la credibilidad y la integridad” del PP, que “silencia el debate aunque el propo Crespo fuese en su día subordinado a Feijóo”, toda vez que era miembro del consejo de administración de Portos de Galicia cuando Feijóo era conselleiro de Política Territorial, en tiempos de Manuel Fraga.
Cuando no había transcurrido ni un día entero tras el veto Feijóo sí accedió a hablar de la financiación de su partido, pero en la radio. Al ser cuestionado por los errores de la formación en los últimos años el titular de la Xunta adimitó que “nuestra financiación del partido ha sido, claramente, una fórmula” que derivó “en un grave error”. Esto, dice, “probablemente” sucedió “por un vacío legal” que el Estado español en su conjunto tiene “pendiente” de subsanar. En cualquier caso, admite sin dar más detalles, “no lo hemos hecho de forma correcta” y esto “tiene pocas dudas”. “Tuvimos personas que utilizaron las siglas del partido para enriquecerse”, añade, y eso “nos ha costado y todavía nos va a costar mucho sufrimiento y muchas dudas sobre la honorabilidad de los cargos que hoy por hoy dirigimos el partido”.
La coincidencia en el tiempo del veto a la comparecencia y de la reflexión presidencial a respeto de los dichos errores sembró la indignación en la oposición gallega. El primer grupo en pronunciarse al respecto fue AGE, que a través de un comunicado “exige” que Feijóo “comparezca de manera inmediata” para dar cuenta de esos “errores”. A juicio de la viceportavoz de la coalición, Yolanda Díaz, resulta “urgente” que Feijóo “explique en el Parlamento cuáles son concretamente esos errores” que “también afectan a nuestro país, ya que las cuentas del partido en Galicia también están implicadas en la supuesta financiación ilegal”. “Se pone de manifiesto no solo la falta de vergüenza del presidente, que habla sin rubor de errores de financiación obviando su responsabilidad”, dice Díaz, “sino también la total falta de respeto a la ciudadanía, negándose una y otra vez a comparecer”.
Otros vetos
El de este martes no fue, en cualquier caso, el primero veto del PP a una comparecencia de Feijóo sobre la financiación del partido en concreto o, en general, sobre casos de presunta corrupción que puedan afectar a la formación conservadora. Bien al contrario, desde el comienzo de la legislatura autonómica se han producido, al menos, siete negativas. Así, en febrero de 2013 bloquearon la solicitud del PSdeG para que Feijóo hablara de la “presunta corrupción” de su partido y en marzo, una petición idéntica firmada conjuntamente por toda la oposición.
En julio del mismo año AGE y BNG querían que Feijóo hablara específicamente sobre la “presunta financiación ilegal” del PP y este lo volvió a impedir. En septiembre de 2014 los socialistas volvieron a preguntar exactamente lo mismo y el resultado fue también idéntico. En octubre el PSdeG reclamó de nuevo que Feijóo hablara de financiación y supuesta corrupción, en ese caso en relación a la trama Zeta, y el veto se produjo igualmente.