La XXI edición del festival Curtocircuíto, que arranca este martes 1 de octubre en Santiago de Compostela, se presenta con una apuesta aún más arriesgada que en ediciones anteriores por el cine experimental y la mezcla de géneros audiovisuales. En esta ocasión ha elegido al mundo submarino como el eje temático sobre el que girarán buena parte de las sesiones audiovisuales especiales del festival. Arrancará con la interpretación de una banda sonora improvisada en directo para la ocasión durante la proyección de la película de 1916, dirigida por Stuart Paton, Veinte mil leguas de viaje submarino, basada en el libro de Jules Verne. Toda una declaración de principios para una edición que fijará su mirada en las profundidades del océano y tendrá a las mujeres como grandes protagonistas, ya que un 71% de las películas a concurso están dirigidas o codirigidas por ellas.
Las limitaciones presupuestarias para este año han hecho que el festival reduzca su tamaño y se haga más compacto (las dos únicas sedes para las proyecciones serán el Teatro Principal y la sala Capitol) pero también –según indica Pela del Álamo, director del certamen– va a permitir que Curtocircuíto redoble la apuesta por el cine experimental y por combinar las secciones competitivas del evento con espectáculos audiovisuales que “permiten mostrar la experimentación frente a lo que ocurre con el cine convencional, más estancado”, concluye Del Álamo, quien apunta que el hecho de contar con menos fondos para esta edición les ha obligado a ser “más eficientes y sintéticos” y a elaborar un programa “en el que no hay relleno y las distintas actividades se complementan entre sí”.
Otro de los aspectos destacados de Curtocircuíto 2024 es la gran presencia de directoras en las distintas secciones competitivas del evento, ya que un 71% de los filmes que se exhiben están dirigidos o codirigidos por mujeres. “Es algo natural, porque nunca hemos sido partidarios de aplicar las cuotas, aunque sí de favorecer la presencia de mujeres en el festival. Lo que sucede en este caso es que en el cine no industrial y autoral por el que apostamos hay un cambio de tendencia que ya se viene observando hace tiempo y cada vez hay más mujeres presentes en la dirección, algo que en el cine industrial no sucede”, señala el director de Curtocircuíto.
Entre las secciones competitivas del festival destaca Cosmos, en la que se contará con piezas de realizadores de diversas partes del mundo que ofrecerá un panorama del cine actual en formato corto. Entre los directores más destacados, el austríaco Rainer Kohlberger y el neoyorquino James N. Kienitz, dos figuras destacadas del cine experimental internacional. Además de sus últimos trabajos, en esta sección se podrán ver también los de destacadas realizadoras nacionales como Elena López Riera, Gala Hernández y Marina Lameiro. “Veremos mucho ensayo cinematográfico y mucho cine de no ficción pero que tampoco es estrictamente documental”, apunta Del Álamo.
En las secciones Planeta GZ y Supernova, en la que se concentran los realizadores gallegos emergentes, se podrán ver piezas audiovisuales de temática vinculada al territorio y la familia. “Nuestro objetivo es ofrecer un panorama de lo que está ocurriendo en la escena cinematográfica gallega y aquí mostraremos los trabajos de realizadoras como Nela Fraga, Irene Sanz, Carmen Méndez y Elena Mato, entre otras”, indica el director del certamen.
Espectáculos en vivo y sesiones especiales
Pero más allá de las secciones competitivas, los asistentes a esta nueva edición de Curtocircuíto tendrán la oportunidad de asistir a siete eventos en vivo –algunos gratuitos– que comenzarán con la sesión inaugural y contarán además con montajes realizados por artistas visuales como el japonés Yousuke Yukumatsi, la china Joey Holder o la española Judith Adataberna, que se unirá al músico Emil Saiz en una producción realizada por Curtocircuíto y que estará ambientada en las profundidades del mundo submarino (Teatro Principal. 5 de octubre). La temática marina que tendrá como eje central este año el festival también se prolongará en las sesiones especiales, con la presencia de la oceanógrafa y artista Mae Lubetkin, que ofrecerá una conferencia en la que analizará el futuro de las masas marinas desde una perspectiva científica, pero también mezclada con la ficción.
Explorar las posibilidades de interacción entre la ciencia y el cine es otro de los objetivos del certamen en los últimos años y en esta ocasión otras de las sesiones especiales se realiza en colaboración con el Instituto Galego de Fisica de Altas Enerxías (IGFAE) de la Universidade de Santiago. El director del mismo, Carlos Salgado, dialogará con la responsable de Cultura Científica del CSIC-Galicia, Luísa Martínez, y con el artista sonoro Xoán Xil sobre la relación entre los instrumentos de visión científica y las herramientas de visión y filmación cinematográficos. Ciencia y cine caminarán de la mano durante los seis días durante los que Santiago acogerá el festival.