Los incendios forestales están quemando de nuevo centenares de hectáreas en la provincia de Ourense. Los fuegos de Laza, Chandrexa de Queixa y Carballeda de Valdeorras continúan con su avance sin control, de forma que casi han triplicado la superficie arrasada en tan solo unas horas en la mañana de este miércoles, por lo que ya queman en conjunto unas 1.380 hectáreas. En el caso de Laza, se ha activado la alerta por la proximidad de las llamas al núcleo de As Taboazas, que pertenece al municipio vecino de Chandrexa de Queixa. Las llamas también amenazan casas en los municipios de O Irixo, O Carballiño y Boborás.
Según la última actualización provisional de la Consellería de Medio Rural, en el municipio de Laza han ardido unas 740 hectáreas. El fuego se inició en la noche del martes en la parroquia de Camba. En declaraciones a Europa Press, el alcalde de Laza, José Ramón Barreal, ha explicado que la situación “se está desmadrando”, con un fuego que “pinta mal” y avanza por la sierra en Camba. Pasadas las 13,00 horas, apuntaba que el “viento del norte está tirando fuerte”, si bien por el momento solo afecta a monte del Macizo Central, en una zona sin viviendas en peligro, pero al ritmo al que avanza puede ser “fácil que se acerque a algún pueblo”. Y es que a pesar de que trabajan medios aéreos, hay un “frente muy amplio” de fuego que “no tiene fácil solución”. El regidor de Laza opina que será necesario “anticiparse” con la creación de algún cortafuego que pueda frenarlo.
El fuego en Chandrexa de Queixa, parroquia de Queixa, se inició en la tarde del martes y ya quema unas 200 hectáreas. En el caso de Carballeda de Valdeorras, que comenzó en la parroquia de Casaio, permanece activo y calcina 440 hectáreas. Por su parte, el alcalde de Chandrexa de Queixa, Francisco Rodríguez, avisa de que el fuego “está creciendo bastante” con fuerte viento. Pone de ejemplo que por la mañana en el pueblo se alcanzaban “los 42 kilómetros por hora en el pueblo”. “No quiero imaginar a qué velocidad sopla en el monte”, agrega. Por el momento, descarta que el fuego haya entrado de nuevo en el parque natural de O Invernadeiro.
Por último en la provincia de Ourense, el foco de Verín continúa bajo control. La Xunta apunta que se inició en más de una de decena de focos diferentes e informa de que ha arrasado unas 600 hectáreas. Allí se han destinado 12 aviones y 12 helicópteros, entre otros medios.
Alerta en O Irixo, Boborás y O Carballiño
La Xunta ha activado la alerta por la proximidad del fuego a viviendas en los municipios ourensanos de Boborás, O Irixo y O Carballiño. Según relató a Europa Press la alcaldesa de Boborás, Patricia Torres, los vecinos permanecen en sus viviendas. La regidora apunta a un tren como origen de varios focos: Fondo de Vila, Eixán, Cibreiro, Rodas, Xuvencos, Xurenzás y Ventosa.
Según la información de Medio Rural, el fuego de Boborás se inició en la parroquia de Astureses a las 17,30 horas y está activo. Trabajan dos brigadas, un motobomba y un agente, entre otros medios. Por su parte, el fuego de O Irixio ya arrasa unas 240 hectáreas. Comenzó a las 12,30 horas en la parroquia de San Cosmede de Cusanca. Trabajan siete aviones y 11 helicópteros, entre otro. En O Carballiño, hay un fuego activo en la parroquia de Longoseiros. Se inició a las 15,51 horas. Trabajan dos aviones, tres brigadas y una motobomba.
El fuego ha provocado que se corte la circulación de trenes entre O Irixo y Lalín, informa Adif. Las llamas están cercanas a la vía, por lo que los pasajeros que iban en el tren que circula por la vía de ancho convencional y que salió de Ourense a las 15,30 horas con destino Santiago tuvieron que bajar en O Irixo y seguirán el trayecto en microbús.
Otros fuegos en Boiro y Ponte Caldelas
El Gobierno gallego ha desactivado la Situación 2 de alerta por proximidad a viviendas en el incendio de As Pontes de García Rodríguez (A Coruña), que se había decretado el pasado martes a última hora por la cercanía de las llamas al núcleo de Cuíña. Ha sido estabilizado esta mañana tras quemar unas 105 hectáreas. El ayuntamiento coruñés registraba otro foco a las 22,59 horas que, con todo, quedaba estabilizado a las 7,16 horas de este miércoles. Iniciado en la parroquia de Vilavella, ha quemado 60 hectáreas.
El otro incendio en la provincia de A Coruña es el del Barbanza, que no registra cambios -permanece estabilizado desde el lunes. El fuego se iniciaba el pasado jueves en la parroquia de Cures, en Boiro, con afectación también a los municipios de A Pobra do Caramiñal y Ribeira. Este fuego es el de mayor superficie calcinada en el mes de agosto en Galicia, con 2.200 hectáreas ardidas. La Xunta ha informado de que originó en la chimenea de una vivienda en Boiro.
Paralelamente, en la provincia de Pontevedra, continúa bajo control el incendio de Ponte Caldelas, iniciado en la parroquia de Xustáns y que ha calcinado 380 hectáreas.