El protocolo de desescalada en la hostelería que prepara Galicia incluye la reapertura de las barras de los bares, tras más de un año vetadas por las autoridades sanitarias. Así lo ha confirmado este miércoles el conselleiro de sanidade, Julio García Comesaña, tras la reunión del comité clínico que asesora al Gobierno de Feijóo. La novedad se produce tras las reuniones mantenidas por el Gobierno gallego y los representantes de los hosteleros que el próximo viernes se han vuelto a citar para fijar la redacción final del nuevo protocolo. “Nos pidieron el uso de las barras y en el nuevo documento están prácticamente incorporadas y se permitirá el uso en unas determinadas condiciones”, ha asegurado Comesaña en rueda de prensa.
La comunicación de las nuevas medidas para la desescalada en la hostelería estaba prevista para esta semana pero las partes en conflicto no han llegado a un punto de acuerdo general que permita la puesta en marcha de nuevo modelo. Al igual que otras comunidades como Madrid o Andalucía, Galicia quiere ampliar los aforos de los locales de manera general y establecer nuevos criterios para que aquellos establecimientos que ofrezcan mayores garantías de seguridad puedan ver mejorados sus aforos.
Las negociaciones se producen tras meses de fricciones entre el sector y la administración. La decisión del Gobierno de exigir a los hosteleros el control sobre los certificados de vacunación de sus clientes acabó siendo anulada por el Tribunal Superios de Xustiza de Galicia. A la espera del recurso presentado por la administración gallega, los representantes de bares y restaurantes negocian un nuevo marco de actuación sobre el que todavía no se ha alcanzado un consenso.
Lo de las barras es el único punto que parece estar claro, aunque su puesta en funcionamiento estará condicionada a la adopción de medidas de seguridad, como el uso constante de mascarilla, salvo en el momento exacto de consumir. El principal responsable de la sanidad gallega ha insistido este miércoles en que los bares son un lugar conflictivo, “un sector muy crítico en las transmisión del virus”. Con el verano encarando la puerta de salida, los hosteleros reclaman una alternativa al servicio en terrazas para una comunidad en la que la lluvia es un elemento frecuente que dificulta la opción de reposar sobre el servicio al aire libre la suerte de estos negocios.