La Guardia Civil investiga a un vecino de Alonsotegi (Bizkaia) como presunto autor de un delito de desórdenes públicos por amenaza de bomba. El hombre fue quien supuestamente afirmó el pasado mes de noviembre de que una persona que iba a bordo de un avión que volaba de Bilbao a A Coruña llevaba un artefacto explosivo. Su aviso provocó la paralización del aeropuerto coruñés de Alvedro y la activación de un protocolo especial.
Según ha informado el instituto armado en un comunicado, la investigación ha concluido que el motivo de su acción fue “la mala relación existente” con la persona a la que denunció como portadora de una bomba.
Los hechos ocurrieron el pasado 19 de noviembre pasadas las 6.30 de la mañana. A través de la aplicación móvil del Gobierno Vasco (Zuzenean) habilitada para la comunicación con la ciudadanía se recibió un mensaje que alertaba de que una persona que iba a viajar en el avión llevaba una bomba en la mochila “con la intención de hacerla explotar durante el trayecto”.
Una vez identificado el vuelo, se puso en marcha un despliegue policial de emergencia en el aeropuerto de Alvedro, en el que participaron, según la Guardia Civil, más de 50 agentes de diferentes especialidades, además de otros servicios de urgencia y la dirección del aeropuerto. Cuando la aeronave aterrizó se le indicó que se desplazase a una zona segura de la terminal. Allí se evacuó de emergencia al pasaje y se registró el avión. Finalmente quedó descartado que hubiese una bomba a bordo y los agentes concluyeron que la amenaza no era real.
La investigación llevó el 21 de febrero a identificar al presunto autor de los hechos, que fue citado en calidad de investigado.