El presidente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), Jorge Cebreiros, ha afirmado este martes que no le parece “sensible” que la CEOE pague a su presidente, Antonio Garamendi, un salario de unos 400.000 euros al año, y ha apuntado que esa situación puede traducirse “en lo que está pasando”, es decir, en “ataques” a la clase empresarial. En respuesta a preguntas de los medios, Jorge Cebreiros ha eludido valorar si es adecuado o no que tenga un contrato de alta dirección o sea autónomo porque, ha explicado, desconoce cuál era la situación contractual de los anteriores presidentes. Al respecto, ha señalado que, aunque la presidencia se asuma para 4 años, puede ocurrir que la persona que la ostenta decida dejarla antes, y quizá sea “mejor para la organización” tenerlo como autónomo y no como alto directivo, porque tendría que pagarle una indemnización.
En todo caso, y al margen de la cuestión de la forma, sí ha criticado el fondo, y ha señalado que “no es sensible en estos momentos” que un alto directivo de la CEOE tenga ese salario. “Puede producirse lo que se está produciendo, un ataque a los empresarios. Que si no nos sentamos a la mesa del diálogo social, que no nos sentamos a revisar el SMI porque nuestro máximo directivo tiene un salario que no es sensible con la realidad. Eso puede estar complicándonos la vida a todos”, ha sentenciado.
Por otra parte, preguntado sobre la subida del SMI, el presidente de la patronal pontevedresa ha manifestado su rechazo a las decisiones que se adoptan dejando “fuera de la negociación” a la parte empresarial. Así, sin entrar a valorar la cuantía de la subida, ha advertido de que debería haber una negociación previa para saber “si todas las empresas y todos los sectores” pueden asumir esa subida. Adicionalmente, ha recordado, “no es lo mismo vivir en Madrid que en Tui” para un perceptor del SMI. Cebreiros ha reprochado al Gobierno que proclame la importancia del diálogo social, mientras que la patronal se entera “el día anterior o el mismo día” de esa decisión.