La familia Franco pone a la venta el Pazo de Meirás

La familia de Francisco Franco ha iniciado los trámites para la venta del Pazo de Meirás. Según asegura el diario ABC, de fuentes próximas a los herederos del general fascista, estos habrían ya solicitado la tasación del inmueble que fue donado al dictador en 1938 mediante coacciones y represión en plena guerra civil, tal y como acreditan numerosas fuentes y documentación y el estudio publicado recientemente por Carlos Babío y Manuel Pérez Lourenzo. Aunque no se conoce el precio, otros medios aseguran que sería de 8 millones de euros.

Empleado durante años como estancia de vacaciones estivales de los Franco, la muerte el pasado 29 de diciembre de la única hija del dictador, Carmen Franco, habría llevado la familia del ex-jefe del Estado durante la dictadura a la venta de un inmueble que acumula numerosos incumplimientos en sus visitas como condición por ser Bien de Interés Cultural (BIC) y que este verano pasaron a ser gestionadas por la Fundación Francisco Franco, que no dudó en afirmar que emplearía la ruta por el Pazo para exaltar la figura del general fascista.

Campaña para que regrese a manos públicas

A pesar de la presión social y política de los últimos años, los Franco se negaron siempre a ceder Meirás, al tiempo que ni desde la Xunta ni desde el Gobierno central se llevó a cabo iniciativa alguna para revertirlo al patrimonio público, tal y como reclaman desde hace tiempo la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica, el Ayuntamiento de Sada -donde se asienta- o la recién constituida Xunta pro Devolución do Pazo.

Precisamente, la vicepresidenta de la Diputación de A Coruña, Goretti Sanmartín, ha denunciado que el anuncio de venta del Pazo de Meirás por parte de la familia de Franco supone la “constatación de que los trabajos de la Xunta pro Devolución do Pazo -impulsada por la institución provincial- van por buen camino”. Además, ha afirmado también que esto “no modifica la estrategia que se está siguiendo” y que en las próximas semanas estará listo el informe jurídico que señala los pasos para que el inmueble pase a ser bien público.

Goretti Sanmartín recuerda que la celeridad de la familia Franco responde a “querer verse libre de una propiedad que es resultado del saqueo al pueblo gallego y que es el centro de una demanda social”. Que apenas mes y medio después de la muerte de la hija del dictador, los hijos decidan vender el Pazo de Meirás se explica, según la vicepresidenta de la Diputación, “a una voluntad de querer desprenderse de un bien que consiguieron de manera ilícita y está siendo reclamado social e institucionalmente”.

Consultado por Praza.gal, el alcalde de Sada, Benito Portela, reconoce que ha conocido la noticia de la intención de la venta del Pazo por parte de los Franco “por la prensa” y que no tiene “información alguna” sobre esta posibilidad. Con todo, recuerda que es la Xunta quien tiene “el derecho de tanteo” en caso de que la familia del dictador llegue a algún acuerdo para deshacerse del inmueble.

Precisamente, la Consellería de Cultura ha aclarado a este diario que las supuestas intenciones son “una cuestión privada que se conoce a través de los medios de comunicación”. “No hay ninguna constancia ni ninguna comunicación formal ni informal por parte de la familia Franco sobre el deseo de vender el Pazo de Meirás”, recuerdan.

Además, insisten en que “la voluntad política de Galicia, manifestada en el acuerdo parlamentario del pasado 27 de septiembre, se centra en procurar incorporar al patrimonio público la propiedad de las Torres de Meirás, sin que esta incorporación al patrimonio público implique un nuevo coste para el pueblo de Galicia, que ya lo asumió en el año 1938”. “Se trata de un acuerdo que refleja el sentir general de la sociedad gallega de no pagarle la familia Franco por este inmueble”, reitera.

El BNG, en las redes sociales, ya ha mostrado su rechazo a las intenciones de la familia Franco. “El Pazo de Meirás es patrimonio del pueblo gallego; es un Bien de Interés Cultural y no se vende. ¡Que nos devuelvan lo robado!”, dicen. Además, la Comisión por la Recuperación de la Memoria Histórica de A Coruña advierte de que el inmueble “no se compra” porque “es de quien lo pagó, el pueblo gallego”. Así, llama a la ciudadanía a “manifestar su clara voluntad de que el Pazo pase a manos públicas”.