Las redes de transporte internacionales y el calentamiento global son las causas que están detrás de la expansión de algunas especies de mosquitos que transmiten enfermedades tropicales de las que España se había mantenido al margen durante décadas. El mosquito tigre (Aedes albopictus) se detectó hace casi 20 años en Catalunya y, desde entonces, constaba su presencia en la costa oriental y sur de España y también en puntos del norte. Ahora se ha confirmado que ha llegado también a Galicia. Un vecino de Moaña (Pontevedra) detectó ejemplares y la Xunta acaba de hacer pública la información.
El Gobierno gallego indicó que la comunicación del hallazgo se hizo a través del proyecto de participación ciudadana Mosquito Alert, en el que colaboran Xunta y Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Un hombre de Moaña encontró algunos mosquitos de esta especie, que fueron estudiados por la Rede Galega de Vixilancia de Vectores. Es la primera vez que se constata su presencia en territorio gallego. La especie preocupa por ser transmisora de enfermedades como el dengue, el zika o el chikungunya, que son graves.
La Xunta aclara que no se ha confirmado la presencia de ninguno de los virus causantes de estas enfermedades en los ejemplares de Moaña y señala que, aunque la especie está presente en otras comunidades, ha habido algunos casos considerados aislados de dengue en 2018y 2019, pero un una circulación del virus.
El Plan Nacional de Prevención, Vigilancia y Control establece en su protocolo que debe constituirse un comité de coordinación de carácter técnico, que la Xunta ya ha creado y en el que habrá representantes de los departamentos de Medio Ambiente, Medio Rural, Interior, del área sanitaria de Vigo (a la que pertenece Moaña) y del Ayuntamiento. Su función será planificar acciones de refuerzo de la vigilancia de la población del mosquito para controlarla y evitar que se extienda. También hará seguimiento de posibles casos de picaduras.
El Gobierno gallego recuerda algunos consejos para la población de la zona: una buena higiene personal y el uso de repelentes. Las picaduras, añade, son molestas y pueden desencadenar reacciones alérgicas de cierta gravedad. La especie cría en pequeños recipientes con agua estancada durante más de una semana, así que pide revisar bebederos de mascotas, floreros o platos que estén bajo macetas.
La aplicación desde la que el vecino de Moaña dio el aviso está pensada para que los usuarios puedan enviar una fotografía de los mosquitos detectados y expertos del CSIC la puedan analizar. Los mosquitos tigre son de color negro intenso con una línea blanca longitudinal central en el tórax y la cabeza y unas patas con bandas negras y blancas. Miden entre cinco y diez milímetros.