El BNG quiere que la Xunta dé el actual curso escolar por finalizado a fecha del 12 de marzo. Según expuso su portavoz nacional Ana Pontón en una comparecencia pública este lunes, el profesorado debe además dejar sin evaluar los contenidos on line que ha venido impartiendo desde que se decretaron los estados de emergencia y alarma por los gobiernos gallego y central, respectivamente.
“Existen dificultades de acceso en la educación a distancia. Hay también una clara brecha digital en el alumnado y una falta de cultura digital en los docentes” que, a su ver, impiden la evaluación justa de las materias enseñadas después de la suspensión de las clases presenciales. El Ministerio de Educación ha descartado en varias ocasiones decretar el fin de curso de manera anticipada.
“La Xunta ha tenido una actuación errática en la enseñanza desde el inicio de la crisis”, denunció Pontón. Como ejemplo, colocó el anunció de Feijóo de que el Gobierno gallego adquiriría 1.000 ordenadores para familias con pocos recursos “cuando hay 1.200 centros escolares en Galicia”.
La candidata del Bloque a la presidencia de la Xunta pidió así que “se favorezaca que alumnado pase al siguiente curso”. Será, adujo, “una promoción académica excepcional que debe ser evaluada por el profesorado con el compromiso de recuperar los contenidos no impartidos en el curso académico 2020-2021”.
Los nacionalistas proponen una “mesa de diálogo” a la Consellaría de Educación, en la que se sienten los representantes sindicales de los profesores, las organizaciones estudiantiles y las asociaciones de madres y padres, para hacer frente “a la situación derivada del coronavirus”. Y recuerdan al departamento autonómico que tiene que decidir y explicar “cómo van a ser las pruebas de acceso a la universidad, qué contenido se va a someter a las mismas”.
Pontón también exige “claridad” a la Xunta respecto a la fechas de las oposiciones a profesor, que otras comunidades autónomas ya han decidido suspender.