“Si se quiere hacer una comisión de investigación para buscar responsabilidades políticas posibles, pues una vez que tengamos el veredicto de la Justicia, entonces, sí que se pueden concretar responsabilidades políticas más claras”. Esa es la nueva postura matizada del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, sobre las peticiones que vienen haciendo las víctimas del accidente del tren Alvia en Santiago en 2013 de que se abra una comisión de investigación parlamentaria que analice las responsabilidades políticas del siniestro. Un matiz, el de que la comisión política se abra cuando finalice la causa judicial, ausente de sus rechazos previos y que aparece al tiempo que la nueva dirección del PSOE cambia la postura de su partido y va a pedir ahora esa investigación política, y cuando la justicia ha imputado al exdirector de Seguridad de Adif, Andrés Cortabitarte, en el cargo entre 2006 y 2013, con PSOE y PP.
Tras el accidente del 24 de julio de 2013, con 80 muertos y 144 heridos, PSOE y PP, cuyos ministros de Fomento José Blanco y Ana Pastor pusieron en servicio respectivamente la línea de AVE y el tren siniestrado, rechazaron en repetidas ocasiones tanto en el Congreso de los Diputados como en el Parlamento de Galicia las peticiones de investigaciones políticas formuladas por BNG, AGE, En Marea, Podemos o Izquierda Unida. Sin embargo, sus posturas comenzaron a cambiar cuando hace un año la Agencia Ferroviaria Europea emitió un informe en el que atacó duramente la investigación oficial del siniestro realizada por el Ministerio de Fomento, que influyó a su vez en la instrucción judicial. La causa judicial se reabrió para analizar responsabilidades más allá del despiste que sufrió el también imputado maquinista del tren, Francisco José Garzón, que no frenó a tiempo antes de la curva de Angrois, y los dos partidos comenzaron a matizar sus discursos, hasta el punto de que la nueva dirección del PSOE quiere ahora una investigación política en la que comparezcan los propios Blanco y Pastor.
Este jueves al presidente Feijóo se le preguntó qué argumento puede dar para que la soledad en la que queda ahora el PP en su negativa a una investigación política no sea vista como un intento de proteger a la exministra popular Ana Pastor. Feijóo no respondió a la cuestión y optó por decir que “la Justicia se está moviendo, dejemos que se mueva”, en referencia a la ratificación el miércoles por parte de la Audiencia Provincial de A Coruña de la imputación de Cortabitarte por no prever el riesgo de un exceso de velocidad por error humano. “La investigación más completa y más profesional es la que se está produciendo en el ámbito judicial, yo creo que eso es lo que quieren todas las víctimas y desde luego es lo que quiere Galicia”, priorizó Feijóo, quien a continuación añadió que “si se quiere hacer una comisión de investigación para buscar responsabilidades políticas posibles, pues una vez que tengamos el veredicto de la Justicia, entonces, sí que se pueden concretar responsabilidades políticas más claras”.
El presidente de la Xunta insistió en que su prioridad es “que la investigación se complete, los jueces actúen con absoluta contundencia y nos digan si hay algún responsable más que el maquinista; nadie discute que ese maquinista llevaba ese tren a 193 kilómetros por hora y si hay alguna responsabilidad, por acción u omisión, que se nos diga quién puede ser responsable, y ahí seguro que la Justicia nos va a dar información probada”.
Frente a las situaciones anteriores, en las que el PP contaba con mayoría absoluta o con el apoyo del PSOE a su negativa, la actual composición del Congreso de los Diputados hace que el cambio socialista permita que la comisión de investigación política salga adelante si el resto de partidos mantienen la postura favorable a la misma que vinieron mostrando hasta ahora. En abril del año pasado, el PSOE sí dio su apoyo a que se debatiese en el Pleno una petición de En Marea, a la que los socialistas acabarían votando igualmente en contra. Sin embargo, el simple hecho de que el PSOE facilitase aquel debate fue considerado por el portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, como “miserable” y “deleznable”. A pesar de que son las propias víctimas las que piden esa investigación, el popular llegó a acusar a los grupos que propiciaron aquel debate de “utilizar a los muertos de un accidente con motivos políticos”.
Las víctimas, “satisfechas” con el cambio del PSOE
Desde la plataforma de víctimas del accidente su presidente, Jesús Domínguez, ha mostrado este jueves su satisfacción por el cambio de postura del PSOE “si se confirma”. “Llevamos cuatro años luchando por que haya también una investigación política del siniestro”, dice, y destaca que el auto con el que la Audiencia Provincial de A Coruña ratificó este miércoles la imputación del exdirector de Seguridad de Adif “corrobora que la Administración hizo algo mal”.
Domínguez relata cómo el cambio de postura de los socialistas ya se veía venir en los últimos meses, con el reciente voto favorable a la investigación del PSdeG en Galicia y con las respuestas que obtuvieron en una reunión con el grupo parlamentario del PSOE en el Congreso. Allí, la presidenta de la gestora del PSdeG y diputada Pilar Cancela les mostró hace un mes la disposición de los diputados gallegos en Madrid a defender ante el resto de sus compañeros la necesidad de una investigación política. Sin embargo, Domínguez quiere recordar que, al margen del apoyo previo de otros partidos, como el BNG, En Marea, AGE o Izquierda Unida, en el PSOE “la primera persona” que les mostró su solidaridad y que impulsó, sin éxito, iniciativas en favor de investigar las responsabilidades políticas del accidente fue el diputado y exalcalde de San Sebastián Odón Elorza.