Este martes 25 de septiembre se cumplieron dos años de las últimas elecciones autonómicas en Galicia que dieron a Alberto Núñez Feijóo su tercera mayoría absoluta. Y este miércoles, nueve años y medio después de su llegada a la Xunta, el presidente gallego volvió a tirar de su tradicional argumentario de que sus antecesores lo hacían peor para justificar que él mismo lleve siete años sin cumplir su propia ley para dar independencia a los medios públicos gallegos. Pero en esta ocasión Feijóo no sólo ha reiterado que la situación era peor con el bipartito de PSdeG y BNG que gobernó Galicia entre 2005 y 2009, sino que asegura que lo mismo está produciéndose con el supuesto control actual de PSOE y Podemos sobre RTVE.
A Feijóo le preguntaron este miércoles En Marea y PSdeG en el Parlamento de Galicia sobre su reiterado incumplimiento de la ley de los medios públicos gallegos impulsada por el PP en 2011, que está provocando masivas protestas entre los profesionales de la radio y la televisión gallegas evidenciados en los viernes negros y la manifestación que el pasado 8 de septiembre recorrió las calles de Santiago. Las respuestas del presidente gallego fueron del tipo “entre TVE y la televisión gallega hay una gran diferencia, sin ninguna duda, pregúntenselo a los profesionales de las dos” o “el modelo de TVE no es el modelo serio, independiente y profesional de la TVG”.
Los portavoces de En Marea y PSdeG, Luís Villares y Xoaquín Fernández Leiceaga, recordaron que siete años después aún están sin cumplir exigencias de la ley autonómica como la creación de un consejo de informativos, la aprobación de un estatuto profesional o la elección parlamentaria por mayoría cualificada del director general de la CRTVG (por el contrario, en 2015 el PP blindó a través de otra ley que el actual director, Alfonso Sánchez Izquierdo, siga en el cargo de manera indefinida).
Para Villares, esos y otros incumplimientos debieran llevar al presidente gallego -al que llamó “Alberto Putin Feijóo, el zar de Os Peares”, en referencia a su aldea de nacimiento- a “revocar al director general por incumplimiento notorio de las funciones de su cargo”. Para Leiceaga, la situación supone un “incumplimiento premeditado y desleal, porque nosotros apoyamos aquella ley, y la apoyamos íntegra, no por partes”.
A ninguna de esas cuestiones dio respuesta Feijóo en su turno de palabra. Por el contrario, además de reiterar que la situación era peor durante el gobierno gallego previo al suyo hace casi una década, aseguró que aquella misma situación está dándose ahora a nivel estatal, atribuyendo a PSOE y Podemos una “gran cacicada” para controlar RTVE. “Lo primero que hicieron ustedes fue un real decreto ley para incumplir la ley, para cesar a todo el consejo de administración de RTVE”, dijo Feijóo, que en ningún momento mencionó el concurso público en marcha para elegir al nuevo responsable con criterios profesionales ni el amplio apoyo interno de los profesionales a los nuevos responsables de los servicios informativos. Feijóo también se preguntó si el modelo que quiere la oposición gallega para la CRTVG es el de “La Tuerka”, el programa presentado por Pablo Iglesias. Otro de los argumentos empleados por el presidente gallego frente a las críticas fue el del liderazgo en audiencias de la TVG: “Lo importante es el respaldo del pueblo gallego”, dijo.
Premio estatal a Ana Romaní por el histórico Diario Cultural
En el debate sobre la censura en la CRTVG, el portavoz de En Marea destacó que este martes la periodista Ana Romaní fue reconocida a nivel estatal con el Premio Nacional de Periodismo Cultural al tiempo que la dirección de la radio autonómica acaba de cancelar su histórico Diario Cultural en su formato habitual convirtiéndolo en microespacios en diferentes puntos de la programación. “Ana Romaní es víctima de su control represivo de la CRTVG”, aseguró Villares, para añadir que “lo más patético es que usted ni sepa quién es porque es el exótico presidente que no escucha la radio o ve la televisión de su país”, recordando una afirmación de Feijóo hace unos días en la que éste admitía que no ve ni escucha los medios públicos gallegos pero que lee los resúmenes que le preparan sus asesores.
La respuesta de Feijóo fue argumentar que él no decide ni los nombramientos ni los ceses en la CRTVG pero criticando una supuesta doble vara de medir de En Marea: “Resulta que cuando se nombra a Ana Romaní para dirigir el programa es correcto”, dijo el presidente. El Diario Cultural fue creado por Ana Romaní en la Radio Galega en 1990, cuando Feijóo aún no había entrado en política.
Exige al BNG respeto a las sentencias de Catalunya
Por otra parte, a pesar de que la pregunta que la portavoz del BNG, Ana Pontón, formuló este miércoles en el Parlamento a Feijóo versaba sobre el elevado coste de los carburantes y de la electricidad en Galicia, la nacionalista comenzó su intervención reprochando al presidente la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia que acaba de condenar a la Xunta por vulnerar la huelga feminista del 8 M con unos servicios mínimos “maliciosos”. La respuesta de Feijóo sobre los carburantes y la electricidad, como en el caso de la CRTVG, fue que el gobierno previo al suyo no hizo nada hace cerca de una década, mientras que para la réplica a la cuestión de la condena por la huelga optó por otro argumentario recurrente: “Empiece usted a respetar todas las sentencias de los tribunales, incluidas las referidas al independentismo catalán”.
Feijóo dijo “acatar” la sentencia sobre los servicios mínimos excesivos impuestos por la Xunta para la huelga feminista, resolución que no tendrá efecto práctico ninguno a pesar de sumarse a otras similares que condenaron al Gobierno gallego por actuar de manera semejante en otras huelgas previas. Sin embargo, Feijóo rebajó la importancia de la cuestión a que fueron “mal dimensionados los servicios mínimos”.
Frente a ese acatamiento suyo de una sentencia que apela directamente a la Xunta, Feijóo pidió al BNG que acate igualmente las sentencias derivadas del conflicto independentista en Catalunya. Y volviendo al debate sobre la cuestión de los carburantes y la electricidad planteada por el BNG, el presidente censuró que esta formación considere que una Galicia independiente tendría unos costes energéticos inferiores. “Deje de contar cuentos del cuento nacionalista de siempre”, le dijo Feijóo a Pontón.