El PP gallego dice “no aspirar a dar paguitas” tras aprobar fondos insuficientes para la renta de inclusión social
A finales del pasado marzo, apenas un mes después de la aprobación definitiva de los Presupuestos Generales de la Xunta para 2017, la Consellería de Política Social se veía obligada a modificar su propio proyecto presupuestario. Lo hizo, como informó Praza.gal, porque acababa de quedarse sin dinero para atender 90 nuevas solicitudes de la Renta de Inclusión Social de Galicia (Risga), la ayuda para personas en riesgo de exclusión vigente desde los años 90. El incremento de unos 5 millones con respecto a 2016 no fue suficiente por el gran volumen de peticiones y el departamento de José Manuel Rey Varela tuvo que inyectar 600.000 euros más procedentes de otra partida, la destinada a sufragar fármacos de personas sin recursos.
Este lunes, pocos días después de que Polítíca Social tuviera que comunicar formalmente esa modificación presupuestaria al Parlamento, la viceportavoz parlamentaria del PPdeG, Paula Prado, analizó el contexto social y laboral durante una entrevista en la Radio Galega. Todavía “hay muchas personas que lo están pasando mal y hay que ayudarles”, admitió Prado, que ubica esta ayuda “por una parte, en el ámbito social”, pero también “para que las empresas puedan generar empleos”, ya que “nosotros no aspiramos a dar paguitas sociales”.
La generación de empleo, señala la parlamentaria, es “lo más digno”, toda vez que los populares tampoco “aspiran” la que “la gente esté en casa y en el paro con 400 euros”. “Aspiramos a suministrar nuestro sistema productivo, a que haya más oportunidades” y la que “puedan tener un salario digno que les permita vivir con dignidad, no una paguita que al final lo único que puede generar es muy poco refuerzo individual para esas personas, que no se siente realizadas si no tienen un puesto de trabajo”, indica la que fuera edil de Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Santiago durante la etapa de Gerardo Conde Roa en la alcaldía.
La referencia a una ayuda económica de la Xunta cómo “paguita” ya había sido empleada, no sin polémica, en otra ocasión por una dirigente popular. Fue, concretamente, en verano de 2014, cuando la entonces conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, explicó por qué su departamento priorizaba la prestación de servicios a las personas en situación de dependencia por encima de las ayudas económicas. Estos servicios, indicó entonces la actual titular de Medio Ambiente y líder del PP en A Coruña, “suponen un esfuerzo económico más grande que hacer llegar paguitas a la familia”.