La derecha no quiere volver a escuchar las opiniones sobre la universidad privada de Abanca de los rectores de las tres universidades públicas. Este viernes el PP ha vetado su presencia en la ponencia parlamentaria que redactará el informe para el proyecto de ley que reconocerá el centro privado, el primero de estas características en Galicia. Lo había propuesto el BNG, junto a sindicalistas de la CIG o representates del estudiantado o del personal de administración y servicios.
Los rectores de A Coruña, Santiago y Vigo ya se han manifestado en contra de la constitución de la universidad impulsada por el banco de matriz venezolana. La consideran redundante con la oferta existente en la pública y recelan de que suponga un “enriquecimiento” del sistema gallego de enseñanza superior. El anteproyecto presentado por Abanca y admitido por la Xunta de Galicia con el único apoyo parlamentario del PP incumple además los requisitos que exigirá, con efecto retroactivo, el decreto ley que, sobre las universidades privadas, ultima el Gobierno central.
Para el diputado nacionalista Manuel Lourenzo, el veto de los conservadores a la comparecencia de los rectores y otros “colectivos especialmente afectados” confirma “la falta de transparencia y su alineación con Abanca en favor de la universidad privada en detrimento de la universidad pública”. Lourenzo entiende que la operación de Abanca con el beneplácito del Gobierno de Feijóo -“elitista, excluyente y absolutamente innecesario”- inicia “un cambio de modelo hacia la privatización de la universidad pública”.