Segundo día de movilización ganadera en Compostela y sexto en Lugo. Tras la masiva tractorada vivida desde el mediodía de este lunes por las principales vías de comunicación de la capital gallega con el foco puesto en los bajos precios que paga la industria, este martes el objetivo se centra en la distribución, concretamente en las grandes áreas comerciales. Tras la asamblea en la que parte de los ganaderos decidieron mantener sus vehículos bloqueando el paso en zonas estratégicas de la ciudad como la avenida de Lugo, la tractorada ha comenzado señalando a algunos de los distribuidores que tiran los precios de la leche. Mientras, el Gobierno central minimiza la movilización y la Xunta, denuncian las organizaciones agrarias, opta por “un perfil bajo”.
Tras una noche de tractores en las calles el movimiento ha comenzado este martes mucho antes del amanecer. Los primeros objetivos de la protesta ganadera han sido dos: de madrugada se buscó el bloqueo del centro logístico de los supermercados Día en el complejo de Mercagalicia, en el polígono del Tambre, para denunciar, explican, que la cadena se niega a firmar uno de los compromisos esenciales para el sector: dejar de emplear la leche como producto reclamo y no tirar los precios. A continuación otra parte de la comitiva se dirigió al área comercial de más reciente apertura en Santiago, el centro A Cancelas, en el que se ubica Carrefour. El objetivo es bloquearlo por idénticos motivos.
Esto sucedía en Compostela mientras, en Lugo, la movilización que comenzaba el pasado jueves, lejos de cesar, parece aumentar su dimensión. Así, una concurrida asamblea desarrollada en las cercanías del centro administrativo de la Xunta decidió mantener los tractores rodeando la Muralla al menos hasta el jueves, cuando termina la movilización en Compostela -a la que por el momento no se suman-, y formular un escrito con reivindicaciones dirigidas a la Consellería de Medio Rural. Según informa Campogalego.com, lo que descartan los ganaderos movilizados en Lugo es, al menos de momento, medidas de presión dirigidas a la industria y a la distribución.
El Gobierno central reduce la participación
Así comienza una nueva jornada de movilización que las noticias que llegan de Bruselas ha contribuido a alimentar. “No queremos limosnas”, sino “precios justos”, se afirmaba a últimas horas del lunes en las calles de Santiago tras conocer que la Comisión Europea, tras la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros de Agricultura, ofrece un paquete de ayudas “inmediatas” de 500 millones de euros para el conjunto de la UE, pero descarta intervenir en los precios. Las medidas, según el Gobierno de España, responde en gran medida a las reivindicaciones del gabinete de Mariano Rajoy.
El Estado saluda el anuncio de la UE y, al tiempo, intenta minimizar lo que sucede en las calles de la capital gallega. Así, en un breve comunicado, la Delegación del Gobiern en Galicia atribuye a la Policía Nacional un dato de participación de unos “800 tractores y unas 1.000 personas”, cifras que difícilmente se corresponden, sobre todo en lo referido al número de vehículos, con la situación de bloqueo vivida a lo largo de toda la jornada por las calles de Santiago. Según la Plataforma por la Defensa del Sector Lácteo el número de tractores que permanecen en Compostela ronda los 3.000.
La Xunta, por su parte, continúa optando por, prácticamente, desaparecer del foco mediático. Así, en otro comunicado, el Gobierno gallego asegura que este lunes el presidente, Alberto Núñez Feijóo, le “trasladó” a “representantes del sector” su “apoyo a los ganaderos”, además de “esperar una mayor sensibilidad de la Unión Europea para garantizar la viabilidad futura de las explotaciones”. La conselleira de Medio Rural, por su parte, participó este lunes en la Conferencia Mundial del Atún, en Vigo, y este martes ofrece declaraciones a la prensa sobre el sector lácteo antes de visitar las obras de un espigón en Porto do Son.