La Xunta compra trajes para los chóferes de sus coches oficiales por quinta vez en cinco años

Los coches oficiales fueron una de las piezas más empleadas por el PP en su apuesta por desbancar al bipartito de PSdeG y BNG del poder en 2009. Vehículos adquiridos por el Gobierno de coalición fueron metidos por los conservadores en el mismo paquete que coches comprados y utilizados en la etapa de Manuel Fraga, junto a detalles más o menos reales respecto a los accesorios del parque móvil o comparaciones con los coches de jefes de Estado de diversos puntos del mundo. Tras llegar a San Caetano, los conservadores tomaron medidas publicitadísimas, como la utilización masiva de coches Citroën y el destierro de los Audi –la Xunta conserva, cuando menos, cinco automóviles de la marca alemana– y otras que no lo fueron tanto, como la renovación anual de los trajes de sus choferes con un gasto que ya se acerca al millón de euros.

El pasado 26 de diciembre, en pleno puente de Navidad, la Vicepresidencia iniciaba los preceptivos trámites públicos para la que será la quinta compra de uniformes para los conductores y conductoras en menos de cinco años. Lejos de permitir, en aras de la austeridad, que los choferes acudan a sus puestos de trabajo con la ropa que consideren oportuna, como ocurre por ejemplo con la mayor parte del funcionariado de la Administración general, el departamento de Alfonso Rueda se dispone a comprar 1.400 prendas de ropa de invierno y 2.660 de verano por un presupuesto de hasta 163.614 euros, casi un 6% más que en la anterior compra, licitada el pasado enero en 154.000 euros y adjudicada en mayo de este mismo año por 115.890.

El incremento del presupuesto del dinero que Vicepresidencia está dispuesta a gastar en estos trajes rompe una tendencia a la baja experimentada desde 2010, cuando el Gobierno de Feijóo compró trajes por primera vez para sus choferes destinando a la operación hasta 215.000 euros. Al año siguiente, en 2011, se ofreció un máximo de 199.579 para la compra de los uniformes y en 2013 el gasto tuvo un tope de 174.908. También el bipartito había comprado uniformes para los choferes en 2008, en su caso por 90.000 euros.

En la contratación que ahora está en marcha, el Gobierno gallego varía ligeramente las cantidades de algunas prendas solicitadas y, muy levemente, algunos de sus precios. Así, por ejemplo, adquirirá 139 prendas de abrigo para hombre, tanto de invierno como de verano, mientras que en la anterior licitación habían sido 65. Del mismo modo, las características del pedido hacen pensar que la Xunta ha pasado de tener una conductora a tener dos, toda vez que en esta ocasión solicita dos trajes femeninos para el invierno y cuatro para el verano y duplica también la compra de medias y zapatos de mujer.

Igual que en anteriores ocasiones, las empresas interesadas en suministrar los trajes y demás prendas tendrán que presentar muestras de sus productos para ser analizadas en el Laboratorio de Consumo de Galicia. Allí se realizarán “ensayos de calidad” para comprobar la composición, observar su “encogimiento tras lavado doméstico”, la “solidez de las tinturas a la limpieza en seco” o su resistencia a la “formación de bolas”. Las compañías tienen hasta el 10 de enero para presentar ofertas y, una vez formalizado el contrato, tendrán quince días “para la toma de medidas”. Un mes después se realizará la entrega de las prendas de verano y tras cuatro meses, de las de invierno.