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La Xunta se suma al discurso del “absentismo laboral” y anuncia que intensificará las revisiones de las bajas

Beatriz Muñoz

Santiago de Compostela —

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La Xunta de Galicia ha presentado un plan para intensificar las revisiones de las incapacidades temporales. En un momento en el que los indicadores coincides en que las bajas laborales se han incrementado, el Gobierno gallego se ha sumado al discurso del “absentismo” y de que existe un “fraude” que supone pérdidas económicas.

El plan lo han presentado este lunes el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño. El jefe del Gobierno gallego ha señalado que las nuevas medidas se implantarán desde finales septiembre tanto en atención primaria como en los hospitales y ha asegurado que el objetivo es que la gestión sea “más ágil.

Gómez Caamaño ha recalcado que “el absentismo laboral es un fenómeno complejo, multifactorial, con gran impacto sanitario y económico”. En el caso gallego, la incidencia está por debajo de la media de España, dijo, pero la duración es superior y eso la coloca como la segunda comunidad, por detrás de Euskadi, en la que tiene más impacto económico.

El programa tiene seis medidas, entre las que está “la intensificación de la actividad inspectora” y el fomento de las consultas presenciales. También se va a crear en los servicios centrales una unidad “de apoyo” a los médicos que prescriben bajas. Ha asegurado que de en los dos últimos meses se analizaron los casos del 10% de las personas con una incapacidad temporal -unos 7.000 pacientes, dijo- y, después de la inspección, el 40% volvieron a su puesto de trabajo.

Desde finales de septiembre, explicó el conselleiro, los partes médicos de atención primaria que estiman la duración de la baja y fijan la fecha de la revisión deberán fijar una cita presencial. Además, habrá unidades asistenciales especializadas en procesos traumatológicos y psiquiátricos menores, que concentran “la mayor carga de procesos de baja temporal”, indicó Gómez Caamaño. Cuando superen los 45 días, la unidad intervendrá para determinar la “necesidad” de la baja. Es una forma, dijo el conselleiro, de “mejorar la prestación sanitaria” y también de “luchar contra el fraude que existe en el absentismo laboral”.