Jugar al Quidditch o recorrer Hogwarts: la magia de Harry Potter hechiza Madrid con una exposición inmersiva
Unas gafas redondas, una cicatriz roja con forma de rayo pintada en la frente, una capa negra y la varita reglamentaria. Estos cuatros elementos han bastado a niños y mayores durante generaciones para imaginar cómo sería convertirse en el mago más famoso de la historia por un día. La imaginación siempre ha sido la mejor amiga de cualquiera que soñaba con viajar a Hogwarts desde el andén 9 3⁄4, jugar en el campo de Quidditch o darse un festín en el Gran Comedor. Hasta ahora. El universo de Harry Potter ha salido de la gran pantalla y se ha colado en Madrid con una exposición inmersiva que promete superar o, al menos, igualar a la ficción.
La muestra nos permite ponernos en la piel de Harry que -por si hay algún mortal que todavía no conoce su historia- es un huérfano que con 11 años descubre que en realidad es un mago y se inscribe en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Por resumir brevemente la trama de la saga, las ocho películas y sus correspondientes libros, escritos por J.K. Rowling, relatan las aventuras del joven aprendiz y sus amigos Hermione Granger y Ron Weasley, aunque el argumento se centra en la lucha entre Potter y el malvado mago Lord Voldemort, quien asesinó a los padres de Harry en su afán por conquistar el mundo mágico.
Con esta explicación y algunas nociones básicas como la definición de muggle (persona sin poderes mágicos) o snitch (pequeña bola dorada con alas con la que se juega al Quidditch) puedes adentrarte tranquilamente en el universo de Hogwarts, al menos en el que presenta la exposición Harry Potter: The Exhibition. El recorrido comienza con un hechizo. Para abrir la puerta que da paso a la primera sala es necesario pronunciar la palabra mágica que desbloquea las cerraduras: “¡Alohomora!”.
La sala de retratos da la bienvenida a los visitantes, donde más de uno se sentirá observado por sus protagonistas. En las películas, son capaces de hablar y moverse de una imagen a otra. En la exposición, puede que alguno siga la mirada. Con estos pequeños guiños a la ficción, la magia envuelve la muestra desde el inicio.
Después de esta sala de retratos hay otros 24 espacios más, cada uno más sorprendente que el anterior. Una réplica del Gran Comedor con velas flotantes, aulas de Hogwarts repletas de trajes originales y accesorios auténticos, la cabaña de Hagrid y su enorme sillón, la alacena bajo la escalera de la infancia de Harry o el famoso campo de Quidditch. Unos escenarios tan realistas que permitirán al público ponerse en la piel de sus personajes favoritos y recorrer cada rincón de la mágica escuela de Hogwarts.
La magia en tus manos
Hay algo todavía mejor que recorrer cada rincón del universo de Harry Potter: convertirse en mago por un día. A lo largo de la exposición, visitantes de todas las edades podrán sumergirse en un viaje único a través del Hogwarts Express. Nada más entrar, todos el mundo recibe una pulsera con la que comienza la experiencia personalizada.
Los visitantes pueden elegir desde la Casa de Hogwarts a la que desean pertenecer (Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw o Slytherin) hasta su varita y su patronus, además de crear sus propios momentos mágicos mientras ganan puntos para su casa con cada actividad interactiva. A lo largo del recorrido por la exposición, van surgiendo diferentes retos en los que el público tendrá que echar mano de la pulsera que recibió al inicio. Escaneándola en los espacios habilitados podrán acceder a experiencias personalizadas que van desde la creación de auténticas pociones mágicas hasta visionar el futuro a través de una bola de cristal.
Cada una de las 25 salas que forman parte de la exposición, cuentan con este tipo de actividades interactivas, además de piezas de atrezo y vestuario original de las películas. Todo empieza en la sala De la página a la pantalla, en la que se exhibe una primera edición de Harry Potter y la piedra filosofal en una cámara acorazada inspirada en las bóvedas de Gringotts. Rodeada de citas literarias y vídeos inspiradores, este espacio permite a los visitantes conectar de nuevo con la historia a medida que acceden a la exposición.
Después, la sala Castillo de Hogwarts ofrece una experiencia multimedia con elementos y criaturas icónicas como el sauce boxeador, los dementores y el mapa del merodeador, en el que los visitantes verán aparecer su nombre, lo que les incitará a seguir explorando la exposición. La sala Casas de Hogwarts sienta las bases de la experiencia interactiva de la exposición, brindando al público la oportunidad de vivir momentos más personalizados con la casa que seleccionen durante su acceso. Aunque los visitantes orienten sus pasos hacia una casa en concreto, esta sala les permitirá experimentar todas las casas de Hogwarts en una sala de celebración, en la que se encuentra el emblemático Sombrero Seleccionador.
Las aulas de Hogwarts están repletas de objetos, criaturas y trajes icónicos. En estas salas, que son más de una, es posible interactuar con lecciones mágicas y juegos a través de pantallas táctiles digitales, dispuestas a revelar los secretos que se esconden detrás de los momentos más célebres sucedidos en esas clases. Además, podrán preparar pociones, predecir el futuro, replantar una mandrágora en el Invernadero de Herbología y usar su varita digital para derrotar a un boggart en defensa contra las artes oscuras.
La Cabaña de Hagrid y El Bosque Prohibido ofrecen una experiencia interactiva de encantamiento patronus. Así, los visitantes podrán descubrir misteriosas criaturas escondidas en el bosque, como centauros o acromántulas, y explorar dentro de la cabaña del conocido personaje. Además, la exposición incluye viñetas de Animales Fantásticos y trajes de la producción de Broadway Harry Potter y el legado maldito, ganadora de un premio Tony. Una recopilación completa de todo el universo mágico de Hogwarts como nunca antes se ha visto.
¿Qué esperar de Harry Potter: The Exhibition?
La exposición ha llegado a la capital con unas expectativas muy altas y aspira a convertirse en una de las más visitadas de los próximos meses. Creada y desarrollada por Warner Bros en colaboración con Imagine Exhibitions y Eventim Live, la muestra ha recibido desde su estreno en Filadelfia (Estados Unidos) en febrero de 2022 a más de dos millones y medio de visitantes a su paso por ciudades de todo el mundo como Macao en China o São Paulo en Brasil, donde también se encuentra disponible actualmente.
Harry Potter: The Exhibition nos brinda la posibilidad de vivir en primera persona los momentos más icónicos de la saga en un espacio que cuenta con 25 salas y que se puede recorrer en menos de dos horas. Sus creadores han apostado por una experiencia totalmente inmersiva en la que los visitantes pueden interactuar con cada uno de los escenarios que se presentan. Una puesta en escena que triunfará entre el público familiar, aunque también sorprenderá a los adultos que decidan acercarse a verla.
Como suele ocurrir en este tipo de exposiciones, el precio es algo elevado. Las entradas rondan los 20 euros de media y, valorando que en su mayoría serán familias las que vayan a la muestra, la visita puede salir cara. Además, a este precio inicial se pueden sumar otros complementos. Durante el recorrido, el personal fotografía a los visitantes en algunos de los escenarios más reconocibles y al final de la visita ofrecen las imágenes por packs de entre 15 y 25 euros. En este sentido, si quieres un recuerdo de la visita, recomendamos que saques tus propias fotos, que están permitidas en todas las estancias.
El recorrido termina en una inmensa tienda repleta de merchandising donde se pueden encontrar desde camisetas, peluches o llaveros hasta un barril de cerveza de mantequilla. Los precios, como es de esperar, son desorbitados. A partir de aquí, ya es opcional rascarse o no el bolsillo.
La exposición, que abrió sus puertas el pasado viernes 4 de octubre, se podrá visitar en el Espacio Ibercaja Delicias hasta el próximo 6 de enero.
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