King se ha dado el batacazo. Su famoso juego, Candy Crush, ha caído este miércoles en su primer día en Wall Street. Con un precio inicial de 16,35 euros (22.50 dólares), sus acciones cayeron hasta los 13,73 euros (18,90 dólares), un 16% menos.
Se trataba del mayor desembarco de una empresa tecnológica en el parqué desde que Twitter tocase la campana allá por noviembre, pero la compañía King Digital Entertainment no ha corrido la misma suerte que la red de 'microblogging': la suya es la segunda peor actuación en la historia en un estreno en la bolsa norteamericana.
¿A qué se debe tal caída? Según Roger Kay, analista de Endpoint Technologies Associates, “cuando las valoraciones se vuelven efervescentes, los inversores acaban decepcionados al ver que las remuneraciones no alcanzan las expectativas”.
“Hay muchas OPVs todavía en proyecto”, asegura Arvind Bhatia, de Sterne Agee. “Los inversores no están hambrientos y están siendo muy minuciosos. Lo que ha ocurrido también dice a los inversores que no deben ignorar lo fundamental”.
La de Candy Crush no es la primera firma de videojuegos que lo pasa mal en bolsa. Las acciones de Zynga, la compañía de FarmVille, han descendido un 4%, y el valor de las de Glu Mobile, la empresa de juegos más pequeña del parqué, ha disminuido un 4,5%.
King cuenta con 180 juegos, y es Candy Crush el que le genera las dos terceras partes de sus beneficios. Para su salida a bolsa, vendió 15,5 millones de acciones, de las 22,2 millones ofertadas, alcanzando así más de 363 millones de euros en su oferta pública de venta (OPV).