¿Una compañía aérea puede cobrar 45 euros a un viajero que lleva una ensaimada como si fuera equipaje de mano? Esto es lo que le ha ocurrido a dos mallorquines que habían comprado este dulce típico de la isla en un horno del municipio de Porreres y que finalmente las regalaron para no tener que pagar. Puede parecer una anécdota más, pero el percance ha vuelto a poner en el punto de mira los abusos que cometen algunas aerolíneas, en este caso Ryanair, debido a la ambigüedad del concepto de lo que se considera equipaje de mano.
En todas las tarifas que se pueden contratar con la aerolínea irlandesa se incluye una pieza de equipaje pequeña que debe caber debajo del asiento, explica la compañía en su web. También se permiten las bolsas compradas en tiendas duty free, en la zona comercial de Aena, que también deben caber debajo del asiento. Sin embargo, cuando un viajero trae una bolsa con un producto comprado fuera de esa zona comercial, a veces surgen los problemas. “El tema de la competencia desleal, dentro de la zona comercial de Aena, es un asunto complejo, pero al menos creo que sí hay un agravio comparativo”, explica a elDiario.es Pep Magraner, gerente de l’Associació de Forners i Pastissers de les Illes Balears, que representa a unos 200 autónomos y empresas que elaboran entre 20.000 y 40.000 ensaimadas a diario, según datos del sector.
Los empresarios pasteleros se sienten perjudicados por este tipo de medidas restrictivas que no afectan a las tiendas que hay en los aeropuertos después de pasar por la zona de control. “El hecho insular nos condiciona la comercialización de los productos que elaboramos en Mallorca, como es el caso de la ensaimada”, afirma Magraner, quien señala que se debería tener en cuenta que se trata de un producto catalogado con la Indicación Geográfica Protegida por su valor patrimonial y gastronómico, como ocurre también con la almendra y sobrassada de Mallorca, el aceite de oliva de Eivissa o los vinos de la tierra de las cuatro islas.
Los empresarios pasteleros se sienten perjudicados por este tipo de medidas restrictivas que no afectan a las tiendas que hay en los aeropuertos después de pasar por la zona de control
Es un problema que no ocurre, sin embargo, con otros productos típicos de las islas, como la mencionada sobrassada de Mallorca, el queso de Menorca o el flaó de Eivissa. “Son productos locales cuya compra por parte de viajeros nacionales es bastante habitual y frecuente, especialmente, en verano”, afirma Magraner. Desde el sector defienden que Ryanair sea “más sensible” respecto al producto local, como ya hacen otras compañías, que aceptan incluso dos paquetes de ensaimadas.
Reacción del Govern
Esta nueva polémica ha desencadenado reacciones políticas en el Govern, que ha exigido a la compañía irlandesa que permita a sus pasajeros que puedan embarcar cualquier ensaimada en sus vuelos, después de haber mantenido, durante la semana pasada, diferentes contactos para valorar la situación. El conseller de Turismo, Iago Negueruela, ha convocado a los responsables de la aerolínea a una reunión urgente a la que asistirá también Pep Magraner como representante de l’Associació de Forners i Pastissers.
La Conselleria de Salud y Consumo explica a elDiario.es que consideran grave que Ryanair, en este caso, cobre como equipaje de mano un bulto que no se tiene que cobrar según la normativa europea porque no le supone ningún gasto a la compañía aérea. “Solo pueden poner límites de dimensiones por la propia capacidad del avión. A partir de aquí, todo es muy complejo, porque cada compañía concibe el ‘equipaje de mano’, de manera diferente”, aseguran las mismas fuentes.
El Govern considera que determinadas compañías se aprovechan de la ambigüedad del concepto ‘equipaje de mano’ para cobrar por algo que el usuario necesita y que a la empresa no le supone ningún gasto adicional. Es decir, cualquier pasajero debería poder subir cualquier producto, como las ensaimadas, siempre que no afecte a la seguridad del vuelo y que tenga las dimensiones que permitan llevarlo en cabina.
Sanciones a aerolíneas
Por este motivo, la Dirección General de Consumo abrió un expediente sancionador el 18 de abril de 2022 contra EasyJet, Eurowings y Volotea que proponía multar con más de 20.000 euros a cada una de ellas por una falta calificada como grave, al limitar el derecho de los pasajeros a subir a la cabina del avión con su equipaje de mano o pedir tarifas más altas para que puedan llevarlo consigo. Anteriormente, FACUA había presentado denuncias contra Vueling y Ryanair por llevar a cabo la misma práctica, según explicó Félix Alonso, Director General de Consumo.
Estos expedientes han sido trasladados al Ministerio de Consumo, señalan fuentes de la Conselleria de Salud y Consumo, con el objetivo de que el Gobierno plantee una estrategia general. Fuentes del ministerio de Alberto Garzón aseguran a este diario que están atendiendo la petición que han recibido del Govern, como hacen con todas las solicitudes que reciben. “Consumo se pronunciará, en su caso, cuando finalice el estudio de la situación”, afirman.
Anteriormente, el Ministerio de Consumo ya había explicado que las compañías aéreas no podían cobrar suplementos por el equipaje de mano, citando una sentencia del juzgado de lo Mercantil número uno de Madrid del 17 de junio de 2022, que dictaminó que cobrar un suplemento por el equipaje de mano estaría incumpliendo la normativa en vigor aplicable.
elDiario.es ha intentado ponerse en contacto con Ryanair, que no ha contestado a las preguntas de este periódico.