“Estamos aquí para exigir un cambio a Europa y a España, para pasar de las palabras a los hechos. La humanidad está en peligro cada día en Palestina”. Con esas palabras ha advertido la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau de la insostenible situación de la población palestina que ha vivido de primera mano como participante en una delegación internacional, de la que también forma parte el eurodiputado de los comunes Jaume Asens, que fue atacada con gases lacrimógenos por soldados israelíes. “La situación es mucho peor de lo que teníamos conocimiento”, ha reconocido Colau en una comparecencia en el Ayutamiento de Ramallah en la que ha recordado que Barcelona rompió relaciones con Tel Aviv hace dos años por el “apartheid, la ocupación ilegal y las violaciones de derechos humanos”. Y ha pedido a la UE y a España que hagan lo mismo. “¿Se pudo hacer con Rusia pero no se puede hacer con Israel?”, se ha preguntado.
“Necesitamos hechos básicos como es un total embargo de armas, sanciones económicas a Israel y suspender relaciones con un Estado que está violando la legalidad internacional y los derechos humanos”, ha reclamado Colau, que ha reconocido que siente “vergüenza” como ciudadana europea. “La palabra es impunidad”, ha dicho sobre la reacción que la UE y la comunidad internacional tienen con Tel Aviv antes de recordado que sólo ayer Israel decidió prohibir la actuación de la agencia de la ONU UNRWA en el territorio palestino, asesinó a decenas de personas en Gaza y mantuvo los “ataques indiscriminados contra la población civil en Líbano”. “Ha seguido violando la legalidad internacional y los derechos humanos”, ha reiterado.
También Asens ha denunciado el “doble rasero” y la “hipocresía” de la UE y de Estados Unidos. “Hemos venido a hacer lo que los gobiernos occidentales no hacen. El genocidio que sufre Gaza y las violanciones sistemáticas de derecho en Cisjordania son responsabilidad de Israel”: “Lo que vale para Rusia debería valer para Israel, lo que vale para la población ucrania debería valer para la palestina”.
Aunque ha concedido que el Gobierno de España ha hecho “mucho” en relación al conflicto, ha avisado de que “no es suficiente”. “Queremos que España sea punta de lanza, vanguardia, en la defensa de los derechos en Europa”. Entre las peticiones a la coalición, Asens ha incluido ua reforma de la ley de comercio de armas, aunque ha admitido que la derecha -refiriéndose a PP, Vox y Junts- no la secundarán porque están “apoyando el genocidio”: “Es difícil que esa ley salga, pero tenemos que intentarlo”.
Las palabras de Colau y Asens se producen después de que sufrieran un ataque con gases lacrimógenos por parte de soldados israelíes cuando acompañaban a “agricultores pacíficos y desarmados” a recoger olivas en Qusra. “Pudimos vivir en primera persona lo que el peublo de palestina sufre cada día, incluso nos atacaron a nosotros. Los soldados no hablaron con nadie, directamente atacaron con gases lacrimógenos y granadas de sonido, pusieron en peligro la vida de personas que estábamos allí presentes”, ha relatado Colau, que ha asegurado que una situación similar habría sido un “escándalo” en diplomacia internacional. “Para mí es lo menos importante, porque es lo que sufre el pueblo palestino cada día: violaciones de derechos humanos con total impunidad”, ha dicho.
Colau ha explicado que después del ataque se puso en contacto con ellos el cónsul en Jerusalén y el secretario del Ministerio de Exteriores para “preocuparse” por su salud: “Les respondí que por suerte estábamos bien de salud, pero que podríamos haber sido gravemente heridos por el ejército israelí y por la presencia de colonos armados”.
“El Gobierno de España, que quiere ser un gobierno democrático y comprometido con los derechos humanos y la legalidad internacional, debe preocuparse por la sistemática violación de derechos humanos de Israel contra el pueblo de palestina”, ha dicho la exalcaldesa: “Se puede hacer mucho más”.