La web linksunten.indymedia.org ha sido bloqueada este viernes por la mañana después de que el Ministerio del Interior decidiera prohibir la publicación. La comunicación oficial les llegó poco antes a las tres personas que mantenían activa la web y que viven en Leipzig, según la agencia dpa. Aún no se ha producido ninguna detención. Las autoridades alemanas hablan de “la asociación que edita la web”, a pesar de que no existe ninguna formalmente constituida.
El ministro del Interior Thomas de Maizière, del mismo partido que la canciller Angela Merkel, la Unión Cristianodemócrata (CDU), dijo en una conferencia de prensa que la web “actúa en contra de la legalidad” y está en contra del “orden constitucional”. El ministro lo justifica con el argumento de que en varios registros efectuados en la ciudad de Friburgo y relacionados con la publicación, la policía aseguró haber encontrado tirachinas, palos y cuchillos. No solo la web ha sido prohibida, sino también su logo.
La web indymedia.linksunten.de existe desde 2009. Se creó en un principio para el sur de Alemania, de ahí su nombre, que significa “abajo, a la izquierda”. Existe otra web, de.indymedia.org, creada en 2000 a imagen y semejanza de la web norteamericana Indymedia a raíz de las protestas del movimiento antiglobalización a finales de los 90.
La web prohibida ahora tenía más visitas visitada que la original, por eso había comenzado a publicar informaciones relativas a todo el territorio nacional, según publica la Indymedia que aún no ha sido víctima de la censura.
Para las autoridades, la web era el mayor foro de la extrema izquierda alemana. Una de las cuestiones que esgrimen como motivo para la prohibición es que en la web se publican comunicados en los que activistas se atribuyen la autoría de actos de sabotaje o de otro tipo, como incendios de coches. En la web había un apartado de libre publicación en el que se podía publicar de forma anónima.
El senador de Interior de Berlín Andreas Geisel, del partido socialdemócrata SPD, reaccionó a la noticia satisfecho, al asegurar que “los extremistas de izquierda utilizaban la página para organizar ataques”.
La oposición tiene una opinión muy diferente al respecto. La portavoz de Interior del partido Die Linke en el Bundestag, la periodista Ulla Jelpke, escribía en un comunicado indignada: “La prohibición de Indymedia ha sido una censura arbitraria”. Según ella, la actuación del ministerio limita las discusiones internas de la contrainformación anticapitalista y de izquierdas. Ello supondría una clara intromisión en la libertad de opinión y de prensa.
Jelpke considera que la prohibición es un acto de “intimidación”, pues no se censura o multa por un contenido concreto, sino por pertenencia a una supuesta organización: “Toda la izquierda alemana está siendo intimidada”.
Doble vara a la hora de censurar
En julio salió al mercado una revista a todo color muy singular. Su nombre, Schwerterträger, hace referencia directa a las Cruces de Caballero, una condecoración nazi que Hitler entregó a sus oficiales mas leales durante la Segunda Guerra Mundial. En el editorial de la publicación se aseguraba que trataba de contrarrestar el ataque de la ministra de Defensa, Ursula von der Leyen, a quien comparaban con Stalin, que tras un escándalo en el Ejército alemán mandó realizar mayores controles entre los soldados alemanes que sospechosos de tener ideología neonazi.
La revista es un buen ejemplo que ilustra la doble vara de medir del Ministerio del Interior a la hora de censurar o no publicaciones. En el primer número se dedica una biografía completa al general Erich Bärenfänger. En la portada, este militar nazi, que se suicidó el 2 de mayo de 1945 en los últimos momentos de la batalla de Berlín, aparece sonriente, así como en casi todas las fotografías que ilustran el interior de la publicación.
En una de ellas aparece con un perro y el pie asegura que amaba a los animales. En otra imagen puede verse su libro de hazañas atléticas. Pocas palabras hay en relación a los judíos, al Holocausto, a la destrucción causada en toda Europa. Eso sí, el general recibe sonriente de las manos de Hitler su Cruz de Caballero. La publicación es poco menos que una apología del nacionalsocialismo de principio a fin. Sin embargo, se vende en librerías entre revistas de cocina o semanarios de información.
Por si este ejemplo no fuera suficente en cuanto a la permisividad con la extrema derecha, partidos como el neonazi Partido Nacionaldemócrata de Alemania (NPD) o el islamófobo Alternativa por Alemania (AfD) tienen asimismo foros en internet en los que se publican comentarios, en ocasiones anónimos, en los que se fomenta la xenofobia y la islamofobia de forma abierta. Tampoco en esa dirección ha tenido lugar censura. Hay, eso sí, muchas denuncias concretas, pero las organizaciones como tales no han sido prohibidas.