La Casa Blanca ha rectificado las declaraciones de este miércoles del presidente Joe Biden, quien dijo haber visto fotos de milicianos de Hamás “decapitando a niños” y aseguró que ni el mandatario ni funcionarios estadounidenses han visto dichas imágenes.
En un comunicado a EFE, un portavoz de la Administración demócrata aclaró que el presidente hizo esas afirmaciones basándose en declaraciones que el Gobierno israelí ha dado “públicamente”.
De acuerdo con el diario The Washington Post, que fue el primero en informar sobre la rectificación del Gobierno Biden, la Casa Blanca señaló que “ni el presidente ni funcionarios del Gobierno han visto las imágenes o han podido confirmar los reportes” de estos hechos “de manera independiente”.
Durante un discurso a la comunidad judía en la tarde de este miércoles, Biden dijo que durante sus años de trabajo en el Gobierno nunca pensó que “vería” o “tendría confirmadas imágenes de terroristas decapitando niños”. En sus declaraciones, Biden se refirió a las afirmaciones no verificadas que habían circulado ampliamente por las redes sociales de que Hamás había decapitado a niños israelíes. “Llevo mucho tiempo haciendo esto”, dijo Biden en la Casa Blanca. “Nunca pensé realmente que vería, que tendría imágenes confirmadas de terroristas decapitando niños”.
Un portavoz de la Casa Blanca citado por The Washington Post aclaró posteriormente que los funcionarios estadounidenses y el presidente no han visto imágenes ni han confirmado tales informes de forma independiente. El presidente basó sus comentarios sobre las supuestas atrocidades en las afirmaciones del portavoz de Netanyahu y en informes de medios de comunicación de Israel, según la Casa Blanca.
En respuesta a las preguntas de The Post, un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel declinó hacer comentarios sobre el estado de los cuerpos de las víctimas.
Hamás, por su parte, negó haber “matado niños, decapitado y atacado a civiles” durante su ataque a Israel y rechazó las “acusaciones inventadas” que han sido “propagadas por algunos medios de comunicación occidentales que adoptan la narrativa sionista”.
El ataque sorpresa de Hamás, que dio comienzo el sábado a una guerra que entra hoy en su quinto día y continúa registrando fuertes intercambios de fuego, ha dejado ya un saldo de al menos 1.200 muertos en Israel y más de 2.900 heridos
Del lado gazatí, el Ministerio de Sanidad palestino informó este miércoles que hasta el momento registra 950 muertos por los bombardeos israelíes de represalia y al menos 5.000 heridos.
A estas cifras se les suman 1.000 milicianos palestinos muertos en territorio israelí en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad tras infiltrarse desde la Franja, según las últimas estimaciones del Ejército.
Por otra parte, el Gobierno israelí ha informado que más de 100 personas han sido secuestradas por Hamás y llevadas a Gaza como rehenes.