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Claves de la escalada de tensión en Oriente Medio tras los ataques a buques mercantes

elDiario.es

4 de agosto de 2021 13:38 h

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El ataque del pasado jueves en el mar Arábigo contra el buque cisterna Mercer Street, de propiedad japonesa pero operado por la empresa Zodiac Maritime, del multimillonario israelí Eyal Ofer, ha provocado una escalada de la tensión internacional en la región.

Perpetrado por un dron, el ataque causó la muerte de dos miembros de la tripulación, un ciudadano rumano y otro británico, e Israel acusa directamente a Irán de haber cometido la agresión. 

Estados Unidos, Reino Unido y Rumanía también acusan a Irán de estar detrás de la agresión. Sin embargo, Teherán niega estar implicado y advierte que responderá con firmeza a cualquier movimiento contra sus intereses nacionales ante el aumento de la presión internacional.

Este martes, otro incidente elevó aún más la tensión en la región cuando un grupo armado abordó un petrolero en el Golfo de Omán. Horas después, los asaltantes abandonaron el barco. Las miradas apuntaban de nuevo a grupos armados apoyados por Irán, que ha negado rotundamente cualquier participación.

“Según información de fuentes de seguridad, las fuerzas armadas de Irán y todas las divisiones de la resistencia islámica en Oriente Medio no tienen nada que ver con el incidente en el Golfo de Omán”, afirmó la Guardia Revolucionaria en un comunicado. El incidente, según ellos, es un intento de Occidente e Israel “para preparar a la opinión pública de la comunidad internacional para acciones hostiles contra la honorable nación de Irán”, añadió.

Por su parte, el ataque del pasado jueves es el primero con víctimas mortales en el constante cruce de sabotajes en cargueros de ambos países y acusaciones mutuas. Tanto EEUU como Reino Unido han protagonizado encontronazos con Irán en el Golfo Pérsico. En el verano de 2019, varios buques petroleros fueron atacados y EEUU acusó a Irán. Días más tarde, la Guardia Revolucionaria anunció el derribo de un dron estadounidense en aguas del Golfo. Ese mismo verano, Irán también detuvo a un petrolero británico en represalia por la confiscación en Gibraltar de otro iraní.

Ahora, la tensión ha vuelto a crecer, aunque una fuente oficial de seguridad iraní citada por la televisión estatal indicó que la República Islámica considera “las amenazas de los funcionarios occidentales y los del régimen sionista (Israel) como propaganda”. No obstante, se mantiene alerta ante la posibilidad de que las palabras se tornen en hechos y hace responsables a Washington y Londres de posibles “consecuencias”. Los incidentes coinciden con la proclamación del nuevo presidente de Irán, el ultraconservador Ebrahim Raisi.

Israel amenaza a Irán

El primer ministro israelí, el ultra Naftali Bennett, ha amenazado este martes a Irán por su presunta responsabilidad en el ataque del jueves. “Irán ya sabe el precio a pagar cuando alguien amenaza nuestra seguridad. Los iraníes deben entender que es imposible sentarse pacíficamente en Teherán y encender todo Oriente Medio desde allí. Esto se acabó”, ha declarado. Bennett también ha asegurado que Israel está preparado para “actuar solo”.

El jefe del Ejecutivo israelí ha defendido que “no hay duda de que Irán estuvo detrás del ataque” y ha asegurado que su Gobierno ha “proporcionado pruebas a Estados Unidos y Reino Unido” que también señalan a Teherán como responsable.

Los ministros israelíes de Exteriores y Defensa, Yair Lapid y Beny Gantz, se reunirán este miércoles con los embajadores de Estados miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, según la radio del Ejército, con el fin de presentarles “pruebas” de la implicación de Teherán en el ataque. 

EEUU promete una “respuesta colectiva”

Por su parte, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, prometió este lunes que su país respondería de forma “colectiva” junto a sus aliados al ataque del jueves pasado. En una rueda de prensa en el Departamento de Estado, Blinken afirmó estar “seguro” de que Irán fue el responsable de ese ataque. “Estamos en contacto muy estrecho con Reino Unido, Israel, Rumanía y otros países y habrá una respuesta colectiva”, agregó el jefe de la diplomacia estadounidense. 

“Irán sigue actuando con una falta de responsabilidad tremenda, en este caso, con amenazas a la navegación, al comercio, a marineros inocentes que simplemente están implicados en el tránsito comercial en aguas internacionales”, subrayó Blinken.

Por su parte, la OTAN ha condenado este martes “firmemente” el ataque y ha expresado su preocupación por las acciones “desestabilizadoras” de Teherán. “Nos unimos a los aliados en condenar firmemente el reciente ataque mortal contra el MV Mercer Street frente a la costa de Omán, y expresamos nuestras condolencias a Rumanía y Reino Unido por las pérdidas que han sufrido”, ha declarado la Alianza en un comunicado.

Reino Unido convoca al embajador iraní

El Ministerio británico de Asuntos Exteriores convocó este lunes al embajador iraní en Reino Unido, Mohsen Baharvand, para exigir que Teherán suspenda “acciones” que pongan en peligro la seguridad internacional. El secretario de Estado para Oriente Medio, James Cleverly, hizo saber al diplomático iraní que Teherán debe “cesar inmediatamente acciones que pongan en peligro la paz internacional y la seguridad”, informó el lunes un portavoz de Exteriores.

El Gobierno británico consideró este domingo como “altamente probable” que Irán sea responsable del ataque al buque, que causó esas dos muertes, y exigió a Teherán que ponga fin “a este tipo de ataques”.

El ministro de Exteriores, Dominic Raab, ya señaló el domingo que trabaja con sus aliados internacionales para consensuar “una respuesta concertada a este ataque inaceptable”. Por su parte, el ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía afirmó que “se reserva el derecho de actuar en consecuencia”.

Irán no cede ante la presión internacional

El Gobierno iraní, que no se había pronunciado hasta entonces, calificó este lunes de “infundadas y provocadoras” las acusaciones sobre su presunta responsabilidad en el ataque del jueves y urgió a los países que le han acusado a que presenten pruebas. 

“La República Islámica de Irán no duda en proteger su seguridad y sus intereses nacionales y responderá de modo inmediato, fuerte y firme a cualquier posible acto de aventurerismo”, dijo el portavoz iraní de Exteriores, Said Jatibzadeh.

El portavoz calificó de “infundadas y provocadoras” las acusaciones sobre la autoría iraní del ataque de la semana pasada y urgió a los países implicados a presentar pruebas. Además, denunció que esos mismos países que ahora acusan a Irán “guardaron silencio ante los sabotajes terroristas contra buques mercantes iraníes en el Mar Rojo y aguas internacionales”, de los que Teherán responsabilizó a Tel Aviv.

Por su parte, el ministerio de Exteriores de Irán expresó ante el encargado de negocios británico y el embajador rumano en Teherán su protesta por las acusaciones “apresuradas y sin evidencias” de sus países y reiteró que la política iraní es “defenderse y dar una respuesta decisiva, oportuna y adecuada” de ser necesario.

Respecto al intento de secuestro de esta semana, Irán calificó estos incidentes de “muy sospechosos”. El portavoz iraní de Exteriores, Said Jatibzadeh, advirtió en un comunicado contra “la creación de cualquier ambiente falso en línea con propósitos políticos especiales”. “Las fuerzas navales de Irán están listas para brindar apoyo, si es necesario, a los buques en tránsito en la región”, agregó el portavoz, quien también expresó la disposición de su país a investigar los sucesos.

La Comisión Europea pide claridad

La Comisión Europea instó este martes a aclarar “las circunstancias completas” del ataque del jueves pasado. “Las circunstancias completas de este ataque deben clarificarse. Tomamos nota a este respecto de las evaluaciones realizadas por Estados Unidos, el Reino Unido e Israel”, declaró la portavoz de la CE Nabila Massrali durante una rueda de prensa de la institución. 

La portavoz condenó el ataque y añadió que tales acciones “contrarias a la seguridad y la libertad de navegación en la región son inaceptables”. Massrali dijo que el club comunitario seguirá “muy de cerca” el desarrollo de los acontecimientos y dijo “deplorar” el fallecimiento de un ciudadano rumano y otro británico en el suceso. También ha transmitido condolencias a sus familiares y amigos.

Por otro lado, Massrali confirmó que el secretario general adjunto del Servicio Europeo de Acción Exterior, Enrique Mora, acudirá al acto de inauguración del nuevo presidente de Irán, el clérigo ultraconservador Ebrahim Raisí. Mora también es el coordinador de los contactos para que Estados Unidos e Irán vuelvan a cumplir el pacto nuclear de 2015.

El Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) también instó el martes a la comunidad internacional a actuar para frenar las “agresiones contra la navegación” en la región petrolera. En la primera reacción árabe a la agresión, el secretario general del CCG, Nayef Falah al Hajraf, condenó en un comunicado “el ataque que tuvo como objetivo un petrolero frente a las costas de Omán”.

Según la nota del CCG (integrado por Arabia Saudí, Baréin, Catar, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Omán), la respuesta debe basarse en “el derecho internacional para garantizar que no se repitan (tales agresiones) y que se preserve el movimiento del comercio y los suministros de petróleo, además de la seguridad y estabilidad en la región”.

Se trata de la primera reacción del CCG, cuyos miembros son aliados de EEUU y con tensas relaciones con Teherán por el programa nuclear iraní y otros motivos políticos e ideológicos.