El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, aceptó la dimisión de los ministros de Economía, Salud y Transporte. Las renuncias se producen poco después de que Lasso se enfrentara una movilización indígena y campesina en contra de la gestión económica del Gobierno, que duró 18 días y terminaron con seis personas muertas y más de 500 heridos.
Lasso tomó juramento a los nuevos titulares de esas carteras el martes. Pablo Arosemena, exgobernador de la provincia de Guayas, es el nuevo ministro de Economía y Finanzas. Darío Herrera, empresario inmobiliario, pasará al de Transporte. En Vivienda quedará la arquitecta María Gabriela Aguilera, que ocupaba el lugar de viceministra. Andrea Montalvo se hará cargo de la Secretaría de Educación Superior. Lasso dejó pendiente el nombramiento de quien se hará cargo del Ministerio de Sanidad, tras la renuncia ayer de Ximena Garzón.
La designación de Pablo Arosemena en Economía, un empresario del área de comercio, puede ser leída como giro de la política económica. El Gobierno podría avanzar tras su designación con una política de reducción de impuestos. “El comercio no aguanta más impuestos”, decía Arosemena en 2017.
El nuevo ministro de Economía es parte de la Fundación Ecuador Libre, la organización que creó Guillermo Lasso para armar su plan de gobierno, según el medio ecuatoriano El Universo. Es economista, especializado en Administración, en septiembre del 2021 asumió como gobernador del Guayas, donde le tocó responder a los motines en las cárceles.
En su discurso, Lasso dijo que los cambios “no han sido forzados por coyunturas o circunstancias particulares” si no al “al ordenado cumplimiento de etapas, que requieren diferentes tipos de liderazgos”. La crisis política abierta por las más de dos semanas de paro nacional terminó con el compromiso de analizar en mesas de diálogo las diez exigencias propuestas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).
Avanza el diálogo
El Gobierno de Ecuador y los movimientos indígenas se reunirán el jueves en Quito para definir la hoja de ruta de diálogo, tras el acuerdo que puso fin a las protestas. Así lo confirmó este martes la Conferencia Episcopal Ecuatoriana en un comunicado. “Confiamos que este proceso de diálogo, discernimiento y toma de decisiones nos ayude a construir juntos un Ecuador de fraternidad, justicia, equidad”, dice.
El acuerdo de la Conaie con el Gobierno incluyó una rebaja en el precio de las gasolinas subsidiadas y el compromiso de Lasso para frenar la expansión de las actividades petroleras y mineras en territorios indígenas, sobre todo en la Amazonía. Las demandas también denunciaban el deterioro en el sistema de salud y la falta de medicinas e insumos en las unidades de atención del Estado. Durante la protesta, Lasso declaró la emergencia en el sector sanitario.