Kamala Harris cuenta con la aprobación de figuras clave dentro del partido y ya ha conseguido el apoyo del número de delegados necesarios para garantizar su nominación como candidata de los demócratas tras la retirada de Joe Biden.
Se espera la nominación de manera remota y antes de que el 19 comience la Convención Nacional del Partido Demócrata, que escenifica el cierre del proceso de primarias para las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre en Estados Unidos.
Esto es lo que sabemos sobre el proceso de nominación demócrata:
Votación telemática y adelantada
Mientras todo el foco está puesto en el despegue de la vicepresidenta para resucitar la campaña, la presidenta de la Convención Nacional Demócrata, Minyon Moore, ha recordado que la nominación continuará siendo vía telemática y antes del 19 de agosto, cuando empieza la convención del partido en Chicago.
“Todavía hay una necesidad de un componente virtual en nuestro proceso de nominación. Eso no ha cambiado”, ha dicho, según recoge Reuters, y ha añadido que se utilizará un sistema de votación electrónica para cumplir con los plazos. Cuando Joe Biden aún encabezaba la nominación, la votación tenía que ser esta misma semana, pero las presiones por parte de la expresidenta de la Cámara de los Representantes, Nancy Pelosi, y el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer, consiguieron ampliar el plazo.
Está previsto que la votación se lleve a cabo entre el 1 y el 5 de agosto, para así haber formalizado la candidatura antes del día 7.
La decisión de adelantar la votación antes de la Convención se debía a que, en un principio, en Ohio es necesario inscribir al candidato oficial antes del 7 de agosto para que pueda aparecer en las paletas electorales del estado. A pesar de que finalmente Ohio decidió ampliarlo hasta el 1 de setiembre, los demócratas han decidido ceñirse a la fecha antigua para asegurarse de que en el futuro no haya problemas legales con el resultado que pudiera salir en el estado, sobre todo teniendo en cuenta que los seguidores de Donald Trump, y el propio Trump, insisten en denunciar falsamente que las elecciones del 2020 estuvieron amañadas y les robaron la victoria.
Proceso “abierto”
A pesar de que Harris está encarrilada para ser la presidenciable, el presidente del Comité Nacional Demócrata, Jaime Harrison, insistió el lunes por la noche que el partido está comprometido a celebrar un proceso de nominación “abierto y justo”. Por el momento nadie ha salido a disputar el lugar a la vicepresidenta, que ya está consolidada dentro del partido para ser la nominada. Según el último recuento de Associated Press, Harris ya cuenta con 2.668 delegados comprometidos.
Una de las últimas figuras de peso dentro de la galaxia demócrata que se ha subido al carro de Harris ha sido George Clooney. El actor, que también es un importante donante del partido, ha celebrado la decisión de Biden de retirarse y ha asegurado en la CNN que apoyará a Harris. Hace tan solo dos semanas, Clooney publicó un duro artículo en el New York Times en el que pedía al presidente que se retirara de la campaña electoral.
Las reglas del Comité Nacional Demócrata establecen que un candidato debe recibir el apoyo de al menos 300 delegados para aparecer en la papeleta electoral de la convención y después necesita el voto de al menos 1.976 delegados para obtener la nominación. Del total de 4.000 delegados que se reunirán en Chicago, Biden ya obtuvo el apoyo de más de 3.800 durante las primarias.
Harris empieza por el cinturón industrial
El lunes, Harris ya pasó al ataque contra Trump en Delaware. Recordó su pasado como fiscal y puso sobre la mesa la condena del magnate por el caso Stormy Daniels. La campaña ya se perfila como una lucha entre la fiscal y el convicto por 34 delitos, una imagen que parece que Harris utilizará recurrentemente en los cuatro meses que quedan hasta las elecciones.
La vicepresidenta arrancará oficialmente su campaña en Milwaukee (Wisconsin), justo donde la semana pasada Trump era coronado como el candidato republicano.
La elección de la ciudad también responde a la lucha con los republicanos que se está dibujando en los estados del Midwest. En Michigan, Wisconsin y Pensilvania, Biden derrotó a Trump por un margen muy ajustado el 2020 y serán clave para determinar el resultado electoral de los comicios del próximo noviembre.