El Gobierno de India ha confirmado la incursión este martes de cazas indios para bombardear campamentos insurgentes en territorio paquistaní, tras el atentado que mató el pasado 14 de febrero a 42 policías en la Cachemira india y que fue reivindicado por el grupo terrorista con base en Pakistán Jaish-e-Mohammed (JeM).
La Fuerzas Aéreas indias “atacaron de madrugada el campamento de entrenamiento más grande de Jaish-e-Mohammed en Balakot”, en la Cachemira bajo control de Pakistán, afirmó en una rueda de prensa el secretario de Exteriores de India, Vijay Keshav Gokhale.
“En esta operación fueron eliminados un importante número de terroristas del JeM, entrenadores, comandantes de alto rango y grupos de yihadistas que estaban siendo adiestrados para acometer ataques”, ha explicado el secretario de Exteriores.
Gokhale, que se ha limitado a leer un comunicado sin responder a preguntas de la prensa, ha asegurado que el ataque fue llevado a cabo tras recibir “fiable información de inteligencia” que señalaba que “el JeM estaba planeando otros ataques terroristas suicidas en varias partes del país, y los fidayeen (guerrilleros) yihadistas estaban siendo entrenados para ese propósito”.
“Ante el peligro inminente, un ataque preventivo era absolutamente necesario”, ha señalado. Las instalaciones destruidas en Balakot durante las operaciones indias de esta mañana estaban dirigidas por Maulana Yousuf Azhar, alias Ustad Ghouri, cuñado de Masood Azhar, jefe de JeM, aseguró el secretario de Exteriores indio.
La India decidió llevar a cabo acciones militares en el territorio paquistaní después de haber urgido a Islamabad en reiteradas ocasiones a tomar acciones contra el JeM, y de proveerle información de inteligencia sobre su ubicación para proceder, según ha explicado Gokhale.
“Pakistán no ha tomado acciones concretas para desmantelar la infraestructura de los terroristas en el suelo paquistaní”, ha señalado. Por lo que India “está firmemente comprometida y resuelta a tomar todas las medidas necesarias para combatir la amenaza del terrorismo”.
Gokhale ha asegurado que la operación, que se desarrolló en una zona montañosa, fue planeada evitando las víctimas civiles, y que “dado que ocurrió hace muy pocas horas” aún se esperan más detalles sobre los resultados de la acometida militar.
Después de esto, la India espera que Pakistán “esté a la altura de su compromiso y tome acciones para desmantelar todos los campamentos” terroristas, ha explicado el funcionario, que ha asegurado que las operaciones de estos grupos con esas amplias bases no podrían ser posibles sin el conocimiento de las autoridades paquistaníes.
Pakistán, por su parte, ha acusado a India de violar su espacio aéreo con cazas de combate que lanzaron explosivos, aunque ha señalado que no han causado daños ni víctimas, al tiempo que ha dicho que tiene todo el derecho a una “respuesta razonable” por esta “grave agresión”.
“Tras una efectiva respuesta por parte de las Fuerzas Aéreas de Pakistán (los cazas indios) descargaron una carga mientras escapaban, que cayó en Balakot”, ha señalado en su cuenta de Twitter el portavoz del Ejército paquistaní, el mayor general Asif Ghafoor.
La acción militar de la India llega como respuesta al atentado suicida con un vehículo cargado de explosivos ocurrido el pasado día 14 en el que murieron 42 policías, y que fue reivindicado por JeM.