Milei y Maduro se enzarzan en una disputa de rehenes y espías
En un momento de falta de diálogo entre los gobiernos de Javier Milei y Nicolás Maduro, las denuncias de los opositores venezolanos asilados en la embajada argentina en Caracas, las negociaciones para su liberación, la salida de uno de ellos y la detención de un gendarme argentino al que Venezuela acusa de terrorismo tensan aún más las relaciones. Mientras tanto, Brasil y Colombia intentan algún tipo de mediación en los frentes abiertos que tienen sus vecinos de América del Sur.
Maduro rompió relaciones con el Ejecutivo de Milei por su posición ante las cuestionadas elecciones del 28 de julio en las que él fue proclamado presidente reelecto en medio de un reclamo mundial por la publicación de las actas electorales. El inquilino de la Casa Rosada reconoció el triunfo del opositor Edmundo González Urrutia y retiró a su personal diplomático. Desde entonces, la embajada argentina en la capital venezolana está siendo custodiada por Brasil, trascendiendo los cortocirtuitos que hubo entre Milei y Lula da Silva por los ataques verbales del mandatario ultraderechista al líder del Partido de los Trabajadores.
La embajada argentina tutelada por Brasil
La situación de los seis colaboradores de la líder opositora María Corina Machado, incluida su jefa de campaña, que se encuentran refugiados en la embajada desde marzo ha vuelto a estar en el foco mediático. Según Argentina, los asilados se ven sometidos a cortes de agua y del suministro eléctrico, restricciones en la entrada de alimentos y la “constante presencia de fuerzas de seguridad en los alrededores de la sede diplomática”.
Venezuela ha exigido un salvoconducto para el encarcelado exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas a cambio de otorgar la misma medida a los seis opositores del chavismo, reveló el canciller de Colombia. Según el jefe de la diplomacia colombiana, Luis Gilberto Murillo, su país ha actuado como mediador para resolver la crisis de varios meses entre Maduro y Milei.
“Ellos (el chavismo) pedían que Argentina liberara a una persona muy cercana al gobierno de Venezuela y que también se le diera salvoconducto a Jorge Glas en Ecuador”, declaró Murillo, pero no especificó cuándo se hicieron estas peticiones, ni a qué funcionario se refiere.
Fernando Martínez Mottola, uno de seis opositores venezolanos asilados desde marzo pasado en la embajada de Argentina en Caracas, salió voluntariamente del edificio el jueves y se entregó a las autoridades de Venezuela, según han informado varios medios venezolanos e internacionales.
Otros medios, como el canal NTN24, señalan que su salida fue fruto de una “larga negociación internacional”. De los seis asilados en la embajada argentina Martínez Mottola es el único que no pertenece a Vente Venezuela, el partido de María Corina Machado.
La última vez que Argentina confió el edificio de su embajada a otro país (Brasil) fue en Londres, tras 1982, con la guerra de Malvinas, recuerda a elDiario.es Pablo Tettamanti, exvicecanciller durante el Gobierno de Alberto Fernández (peronismo de centroizquierda). “América Latina ha tenido una historia de asilo diplomático, entonces Venezuela no tiene derecho a ingresar a la embajada, pero tampoco la obligación de dar salvoconducto. Como nosotros retiramos al personal diplomático y el embajador no está más, pasó a ser una dependencia brasileña. Los venezolanos asilados se quejan de que le cortan los suministros: cómo logramos revertir esa situación se debe tratar tras bambalinas, porque no hay nada escrito”.
Mediación de Colombia, negativa de Ecuador
Ecuador rechazó la propuesta de Venezuela para entregar un salvoconducto al encarcelado exvicepresidente Jorge Glas. Es sabido que con su detención, el Gobierno de Daniel Noboa violó los tratados internacionales sobre asilo político. Glas se encontraba refugiado en la embajada de México en Quito cuando las fuerzas de seguridad irrumpieron en el edificio en abril para arrestarlo por un supuesto caso de corrupción.
A raíz de la incursión en la embajada, México demandó a Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y sacó a su personal de ese país. También delegó a Suiza su representación diplomática en Quito.
La canciller ecuatoriana, Gabriela Sommerfeld, explicó que entre agosto y septiembre recibió llamadas desde Colombia y Brasil que transmitieron la propuesta venezolana de otorgar el salvoconducto a seis opositores del chavismo asilados en la sede diplomática argentina a cambio de que Ecuador hiciera lo mismo con Glas.
“Cuando se nos hizo esta propuesta, por supuesto, el señor presidente (Daniel Noboa) dio una directriz muy clara: aquí no estamos a favor de la impunidad, aquí no vamos a favor de la corrupción y aquí no somos aliados del régimen de (Nicolás) Maduro”, señaló Sommerfeld en una entrevista con radio Democracia.
El gendarme argentino
Esta semana, un nuevo episodio estalló tras la denuncia del Gobierno de Milei de “secuestro ilegal” de un gendarme argentino en Venezuela, mientras que altos funcionarios de Maduro aseguran que en realidad formaba parte de un plan “terrorista”.
El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, ha confirmado que retienen al gendarme Nahuel Gallo, de 27 años, por estar “cumpliendo una misión” en territorio venezolano tras cruzar la frontera con Colombia, insinuando que se trata de un espía.
Durante su programa semanal transmitido por el canal estatal VTV, Cabello desestimó la versión argentina de que Gallo viajaba para visitar a su familia, acusándolo de ser parte de un “plan terrorista” contra Venezuela con la participación de “mercenarios extranjeros”.
La respuesta de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, no tardó en llegar. Bullrich afirmó que Gallo “va a volver a casa” y que para cumplir ese objetivo hizo saber que “se tomarán las medidas que se tengan que tomar”. La ministra subrayó que, aunque Gallo es un miembro de los cuerpos de seguridad, “fue como ciudadano a visitar a su familia” y acusó a Cabello de decir “mentiras totales y absolutas” sobre el gendarme quien, según ella, publicó fotos de Catamarca (provincia argentina) y Chile en sus redes sociales. Además Bullrich dijo que “en Venezuela hay varios rehenes que son utilizados como moneda de cambio”.
El propio Milei se refirió al caso del gendarme. “Agotaremos todas las instancias para traerlo sano y salvo”, dijo el mandatario argentino a la vez que calificó a Maduro de “dictador criminal”. Además, el presidente se reunió con familiares de Nahuel Gallo, según confirmaron fuentes oficiales. El encuentro se produjo en la noche del jueves en la provincia de Tucumán, en el noroeste del país, a la que Milei viajó para recibir un premio otorgado por la Fundación Federalismo y Libertad. Por su parte, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, pidió a los argentinos que se abstengan de viajar a Venezuela.
El vicecanciller Tettamanti sostiene que el problema de base es que se perdieron los cauces normales para tratar este asunto. “El gendarme detenido en Venezuela es un asunto típico consular, pero no tenemos cónsules en Caracas. No podemos dar una debida protección. Por otro lado, si hubieran querido lo rebotaban en la frontera ¿Por qué Venezuela no lo expulsó?¿El gendarme tiene acceso a abogados?. Se ha vuelto una situación anormal, con varios interrogantes. Podemos armar toda la bambolla política, pero nos hemos metido en un brete”.
Entre bastidores existen gestiones y contactos, pero no negociaciones formales concretas. La participación de Brasil en condición de garante de los intereses argentinos en Caracas podría abrir una puerta para resolver el entredicho sin que escale el conflicto. La Cancillería argentina, que conduce Gerardo Werthein, hizo saber que se activó la búsqueda de mediadores como Colombia, Francia y Brasil.
0