La primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, ha dicho este miércoles que está “completamente comprometida” a subir las pensiones en línea con la subida de la inflación. Truss ha dicho que mantendría el “triple lock” [triple cierre], una norma introducida por el Gobierno conservador en 2010 en la que se comprometen a incrementar las pensiones financiadas con fondos públicos en relación con la cifra más alta de tres elementos: inflación, subida salarial media o el 2,5%.
“Hemos sido claros en nuestro programa de que mantendremos el triple cierre y estoy completamente comprometida con él, y también lo está el ministro [de Economía]”, ha dicho Truss. Sin embargo, el ministro británico de Economía, Jeremy Hunt, había dicho este lunes que no podía comprometerse a aumentar las pensiones estatales en función de la inflación en abril, tal y como estaba previsto.
“Soy muy consciente de la cantidad de pensionistas vulnerables que hay y de la importancia del triple cierre... pero no voy a comprometerme en ningún ámbito político concreto”, dijo el ministro el lunes, según recoge Reuters.
El índice de precios al consumo (IPC) anual de Reino Unido se situó en septiembre en el 10,1%, el nivel más alto en 40 años, ha informado este miércoles la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, en inglés). El IPC interanual en septiembre fue de un 8,8%.
En España, todas las pensiones, contributivas o no, crecerán en función de la inflación. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha estimado que ese incremento que se aplicará a las pensiones será de alrededor del 8,5%, en función del dato del IPC interanual en el mes de noviembre. El dato definitivo se conocerá, por tanto, a final de año.
Hunt, que se hizo con el cargo el pasado viernes tras la destitución de Kwasi Kwarteng, anunció este lunes que abandonaba “casi todos” los planes de Truss para reducir los impuestos anunciados en el llamado “minipresupuesto” del Gobierno hace tres semanas. El ministro tiene previsto hacer una declaración sobre los planes del Gobierno en materia de impuestos y gastos el 31 de octubre, informa la BBC.
La gestión de la líder conservadora tras apenas cinco semanas en el poder –desde el pasado 6 de septiembre– le ha granjeado críticas de la oposición e internas, por parte de diputados tories que quieren que se vaya, como Crispin Blunt, Andrew Bridgen y Jamie Wallies, que pidieron su marcha durante el pasado fin de semana.
Este miércoles, el líder del Partido Laborista, Keir Starmer, dijo que Truss “no estaba al mando” y que sus promesas “no duran ni una semana”. “¿Cómo se le pueden pedir responsabilidad [a Truss] cuando no está al mando?”, dijo. “¿Qué sentido tiene un primer ministro cuyas promesas no duran ni una semana?”.