“De acuerdo con los deseos del pueblo, el Reino Unido ha abandonado la Unión Europea. Este es un momento histórico del que no hay vuelta atrás”. Con estas palabras, la primera ministra británica, Theresa May, ha anunciado en la Cámara de los Comunes que su Gobierno ha activado el proceso de salida de la UE tal y como establece el artículo 50 de los tratados.
“Reino Unido está abandonando la Unión Europea. Vamos a tomar nuestras propias decisiones y vamos a realizar nuestras nuestras propias leyes”, ha apuntado May.
“Vamos a aprovechar este momento para construir un Reino Unido más fuerte y más justo, un país del que nuestros hijos y nietos se sientan orgullosos de llamar hogar. Este es nuestro deseo. Y es lo que este gobierno está decidido a hacer”, ha añadido.
Unos momentos antes, el embajador británico en la UE, Tim Barrow, había entregado la carta firmada por May la noche anterior en la que de forma oficial el Gobierno británico comunica su intención a las instituciones europeas. El receptor de la misiva fue Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo.
“Después de nueve meses, el Reino Unido ha cumplido”, dijo Tusk en Twitter. “No voy a fingir que estoy feliz, pero paradójicamente hay algo positivo en el Brexit. El Brexit nos ha hecho, a la comunidad de los 27, más decididos y nos ha unido más que antes”, ha afirmado el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, tras recibir la carta de la primera ministra británica.
Comienza ahora un proceso de negociaciones que será largo y complicado, como reconocen todas las partes implicadas. Londres y Bruselas tendrán que acordar de qué forma se llevará a cabo el divorcio y qué repercusiones económicas y jurídicas tendrá.
Según publica este miércoles the Guardian, Reino Unido ha identificado 700 asuntos diferentes de superposición administrativa que se tendrán que solucionar antes de que el país pueda abandonar la UE. Los tiempos, la ciudadanía o las fronteras van a ser algunas de las claves en la negociación.
En el Parlamento, May se ha comprometido a defender los derechos de todos los habitantes del país, incluidos los nacidos en territorio europeo: “Cuando me siente en la mesa de negociaciones en los próximos meses, representaré a cada personas que viva en cada punto del Reino Unido. Jóvenes y ancianos, ricos y pobres, ciudades, y pueblos, y todas las aldeas y pequeñas localidades. Y también a los nacionales de la UE que han hecho de este país su hogar. Estoy absolutamente decidida a conseguir el mejor acuerdo posible para cada persona de este país”.