El pasado domingo 16 de junio, Guatemala celebró elecciones presidenciales y parlamentarias en las que el joven Movimiento Semilla, con solo cinco meses de vida, logró siete diputados. Su candidata a la presidencia, la exfiscal general Thelma Aldana, lideró la lucha contra la corrupción en su país y ayudó a procesar cientos de casos contra la élite política y empresarial de Guatemala.
Aldana era considerada una de las favoritas para lograr la presidencia antes de que se le prohibiera participar en las elecciones por lo que muchos consideran que son denuncias falsas de malversación y fraude fiscal. Aldana, que ha negado ser culpable de los cargos en su contra, abandonó el país tras recibir amenazas de muerte y una orden de arresto. Para saber más de este tema hablamos con Lucrecia Hernández, diputada recién electa como parte del Movimiento Semilla. Hernández, quien en 2016 se convirtió en la primera mujer en encabezar el Ministerio de Salud en Guatemala, es hija de la antropóloga Myrna Mack, que fue asesinada por los paramilitares de Guatemala el 11 de septiembre de 1990.
Estamos hablando con Lucrecia Hernández, quien fue electa diputada en las elecciones en Guatemala el domingo como parte del Movimiento Semilla. En 2016 ella fue la primera mujer en encabezar el Ministerio de Salud en Guatemala. Hernández es la hija de la antropóloga Myrna Mack, asesinada por los paramilitares de Guatemala el 11 de septiembre de 1990. Bienvenida a Democracy Now!, Lucrecia, ¿podría hablarnos sobre la importancia y qué significa su victoria y la de los diputados que fueron electos por el Movimiento Semilla en las elecciones el domingo?
Claro que sí. Movimiento Semilla es un partido político bastante nuevo. Terminamos de constituirnos como partido político apenas en enero de este año, así que somos un partido de cinco meses de vida. Un partido que tiene cinco principios: incluyendo la democracia, la equidad, la relación armónica con el medio ambiente, el reconocimiento de un país plural y también reconociendo que debemos tener una economía con el humano al centro. Entonces, es nuestra primera elección. Hemos conseguido siete puestos en el Congreso, en un Congreso de 160 diputados. Para ser la primera vez que participamos, no haber tenido candidata presidencial, porque no nos permitieron inscribir a Thelma Aldana, y tener una campaña muy austera y de bajos recursos, consideramos que estos siete puestos son modestos en número, pero son muy valiosos, y esperamos hacer un buen trabajo articulando con otras bancadas en la próxima legislatura de 2020 a 2024.
En términos de los resultados en la elección para presidente, ¿podría hablarnos de los candidatos que pasaron a la segunda ronda y el papel que continúa teniendo la corrupción en la clase política en Guatemala?
En nuestras elecciones generales llevamos a cabo la elección de Congreso, de alcaldías y también de presidencia. Entonces, en una elección en donde tuvimos más de 20 partidos políticos, en algunas incluso más de 25 partidos políticos participando, es muy difícil que alguno de los candidatos o candidatas obtenga la mayoría absoluta. Por esta razón tenemos en los primeros lugares a Sandra Torres, que entró con casi un 25%; al señor Alejandro Giammattei, que vino en un segundo lugar con 13% o 14%; y posteriormente tuvimos a Edmond Mulet en tercer lugar; y en cuarto lugar, Thelma Cabrera. Y, de ahí, todos los demás tuvieron resultados de menos del 10%. Vamos a tener el 11 de agosto una segunda ronda electoral para ver quién, de los dos primeros lugares, entre Sandra Torres y Gammattei, será el próximo presidente o presidenta del país.
Estas elecciones han sido realmente muy particulares, especialmente porque candidatos, candidatas mejor dicho, que estaban punteando en las encuestas al inicio del año, fueron removidas de la carrera electoral. Entiéndase Zury Ríos, quien es la hija del General Ríos Montt, señalado y acusado y condenado por genocidio, y también Thelma Aldana, que fue fiscal general de Guatemala y que lideró la lucha contra la corrupción del 2015 al 2019 de la mano con la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala.
Esta lucha contra la corrupción, que ella lideró, le dio un gran capital político, era una de las favoritas, de las candidatas favoritas, que podría haber ganado la elección. Sin embargo, hubo una alianza entre corruptos, una cooptación de diferentes instituciones, incluyendo el Tribunal Supremo Electoral, la Corte Suprema de Justicia, la Corte de Constitucionalidad, fiscales, un juez señalado de haber sido sobornado, etc, en donde le inventaron un caso penal y eso generó que su inscripción fuera revocada y ya no pudiera participar en la elección. Entonces, lo que vemos es que los corruptos están de vuelta después de la lucha que le iniciamos en el 2015 donde empezamos a develar casos de corrupción, incluyendo casos en los que estaban involucrados nuestra vicepresidenta y presidente de aquel entonces, que actualmente están en la cárcel.
Pues vemos que los corruptos se han aliado, tienen como uno de sus principales aliados, sino es que el jefe de ellos, al mismo presidente Jimmy Morales. Y justamente han logrado cooptar las instituciones para evitar que personas como Thelma Aldana mantengan una vigencia política y puedan eventualmente ser presidentes.
Podría hablarnos un poco de Thelma Cabrera, la líder indígena que encabezó la campaña de un partido de izquierda en Guatemala y salió cuarta en término del número de votos en la elección presidencial, ¿qué significa esto?
Sí, en Guatemala hay varios partidos nuevos que hemos estado participando, Movimiento Semilla es uno de ellos, pero también el Movimiento para la Liberación de los Pueblos, MLP, que es un partido que viene de un movimiento campesino que se llama CODECA. Este movimiento campesino crea su partido político, logra inscribir a Thelma Cabrera, una de sus principales dirigentes, y siendo una mujer indígena en un país machista y racista como Guatemala, el hecho de haber obtenido un cuarto lugar con un 11% de los votos, la verdad es que sorprendió y manda señales respecto a que el voto antisistema y el voto quizá anticorrupción todavía es fuerte en Guatemala.
Gracias Lucrecia Hernández Mack. La felicito en su victoria como nueva diputada en el Congreso de Guatemala.