El presidente francés, Emmanuel Macron, ha declarado este miércoles un confinamiento a nivel nacional para combatir el coronavirus. Entrará en vigor este viernes y permanecerá vigente “como mínimo hasta el 1 de diciembre”, ha afirmado el presidente. “Tras haber consultado a los científicos y dialogado con las fuerzas políticas, económicas y sociales, he decidido que hay que volver a partir del viernes al confinamiento que paró el virus”.
Será necesaria una autorización para salir de casa por motivos justificados como ir al trabajo, comprar o ir al médico. “El teletrabajo estará de nuevo generalizado”, ha señalado el presidente. Todos los establecimientos que reciben público permanecerán cerrados, excepto los esenciales, y los colegios podrán seguir abiertos. Universidades y centros de enseñanza superior tendrán que ofrecer sus cursos de manera online. Por otro lado, los desplazamientos entre regiones dentro del país estarán prohibidos.
“El virus circula a una velocidad que las peores estimaciones no anticipaban”, ha afirmado Macron durante el discurso televisado. “Como en primavera, se podrá salir de casa para ir al trabajo, a una cita médica, para asistir a un ser querido, para hacer compras o para tomar un poco de aire fresco cerca de casa. Los bares y restaurantes estarán cerrados. Los empleados y empleadores que no puedan trabajar seguirán beneficiándose de la prestación por paro parcial”, ha explicado. Las fronteras permanecerán cerradas para las personas de fuera de la UE.
El certificado para salir de casa para “tomar el aire” se limitará a un kilómetro alrededor del domicilio y una hora al día, según ha informado la cadena BFMTV. El primer ministro Jean Castex anunciará este jueves a las 18.30 horas el detalle de las medidas en cuestión.
Francia ha registrado alrededor 1,2 millones de contagiados y 35.785 fallecidos desde el inicio de la pandemia. En las últimas 24 horas se han notificado 36.437 contagios y 244 fallecidos.
Cierres en Alemania
La canciller alemana Angela Merkel ha acordado este miércoles con los gobernadores locales el endurecimiento de las restricciones a nivel nacional. Bares, discotecas y restaurantes de todo el país tendrán que cerrar desde el próximo lunes hasta el 30 de noviembre. También tendrán que echar el cierre cines, teatros, salas de conciertos, gimnasios, piscinas y otras instalaciones deportivas para aficionados.
Las reuniones quedan limitadas a personas de dos hogares y con un máximo de 10. En este sentido, las autoridades recomiendan reducir al mínimo las reuniones con personas no convivientes. Por otro lado, el alojamiento turístico queda restringido exclusivamente a viajes necesarios.
Las tiendas podrán permanecer abiertas siempre y cuando permitan la entrada a un cliente por cada 10 metros cuadrados y los colegios y guarderías también seguirán funcionando.
Alemania ha registrado 14.964 nuevos casos y 85 fallecidos en las últimas 24 horas, según el Instituto Robert Koch. En la primera ola el récord de casos diarios estuvo en torno a 6.000. “Se ha duplicado la cifra de nuevos contagios en una semana. Tenemos que actuar ahora”, ha afirmado Merkel, que ha confirmado que no se puede seguir convenientemente su rastreo. La canciller ha admitido que no es posible actualmente conocer el origen del 75% de los nuevos contactos que se detectan.
Merkel ya endureció las restricciones a mediados de octubre en materia del número de personas permitidas en reuniones privadas y el cierre anticipado de bares y restaurantes en determinadas zonas.