Al menos cuatro personas han muerto esta madrugada por un ataque de Boko Haram en la localidad de Rom, en el norte de Camerún, zona en la que también se han encontrado los cuerpos degollados de otras cuatro víctimas secuestradas el viernes por el grupo yihadista, informaron a Efe testigos presenciales.
“Unos cincuenta asaltantes llegaron a la localidad y, después de robar el rebaño, quemaron las viviendas y se dieron a la fuga”, dijo en una conversación telefónica Oumar, un habitante de la citada población.
Además, esta misma madrugada se encontraron los cadáveres degollados de otras cuatro personas que fueron supuestamente secuestradas por el grupo terrorista en la zona norte del país.
Estos ataques suceden una semana después de que el grupo terrorista secuestrase y asesinase a tres mujeres en la misma zona.
Las fuerzas de seguridad camerunesas alertan de que los secuestros se están multiplicando en la zona norte y 15 civiles han perdido la vida en lo que va de 2018.
Boko Haram, que significa en lenguas locales “la educación no islámica es pecado”, lucha por imponer un Estado islámico en Nigeria y pretende convertir el área del lago Chad en su nuevo bastión.
Desde su aparición hace ocho años en Nigeria, desde donde se lanzan ataques a los países fronterizos, el grupo yihadista ha matado al menos a 20.000 personas.
En Camerún, las muertes en estos años ascienden a 2.500 y hay más de 150.000 desplazados internos.
Para luchar contra el grupo yihadista, Camerún, que cuenta con el apoyo de la fuerza multinacional de la Unión Africana, ha desplegado a 8.500 militares en la zona.