La portada de mañana
Acceder
España tiene más de un millón de viviendas en manos de grandes propietarios
La Confederación lanzó un ultimátum para aprobar parte del proyecto del Poyo
OPINIÓN | Aldama, bomba de racimo, por Antón Losada

La tormenta tropical Harvey dejará a 30.000 personas en refugios temporales en EEUU

EFE/eldiario.es

La tormenta tropical Harvey continúa su paso por Texas produciendo inundaciones sin precedentes en el sureste del estado que han dejado más de un metro de agua en el área metropolitana de la ciudad de Houston. Según el Servicio Metereológico Nacional de EEUU, las inundaciones podrían llegar al metro y treinta centímetros. La tormenta tropical ha causado ya ocho muertos y se espera que deje 30.000 refugiados y que 450.000 personas necesitarán algún tipo de asistencia, según la Agencia Federal de Gestión de Emergencias.

El Centro Nacional de Huracanes de EEUU ha indicado que Harvey se halla a 40 kilómetros al noreste de Port O'Connor (Texas) y presenta vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora. La tormenta se mueve este lunes “lentamente” en aguas del Golfo de México, aunque podría volver a tocar tierra en los próximos días.

Greg Abbot, gobernador de Texas, ha informado de que movilizará a todos los agentes de la Guardia Nacional para trabajar en las tareas de rescate, un total de 12.000, según apunta CNN. Además, parte del Cuerpo de Ingenieros del Ejército norteamericanos han sido movilizados para asegurar la liberación controlada de las aguas de los embalses de Addicks y Barker, en peligro de desbordamiento.

El presidente de EEUU, Donald Trump, ha aprobado este lunes la declaración del estado de emergencia en el estado de Luisiana.

Trump elogió a través de Twitter las medidas desplegadas por el Gobierno: “Estamos haciendo esfuerzo total y todo va yendo bien!”. El mandatario acudirá a Texas para inspeccionar los daños causados por Harvey este martes, una visita con la que se busca no caer en los errores de George Bush con el huracán Katrina de 2005 al ser criticado por su tardanza en visitar Nueva Orleans.

El alcalde de Houston, Sylvester Turner, alertó así este domingo a sus ciudadanos de la dureza de la tormenta: “Aunque haya algo de calma, no piensen que la tempestad ha terminado”. Dos millones de habitantes todavía siguen guarecidos en sus casas y más de 1.800 residentes han huido a los 35 refugios que Cruz Roja ha establecido en Texas y Luisiana.

El Servicio Nacional de Metereología ha alertado de que se trata de “un suceso sin precedentes”, cuyo “impacto superará todo lo conocido”. Prueba de ello es la información difundida por el Centro Nacional de Huracanes de EEUU. La tormenta tropical, degrada a este nivel el sábado, ha presentado vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora, pero las lluvias que ha generando hacen que se mantenga como un ciclón peligroso.