El Partido de Acción Nacional de México (PAN) ha destituido a Christian Camacho, a quien se le atribuye haber convencido al senador Julen Rementeria para realizar un encuentro con el líder de Vox, Santiago Abascal, según informan medios locales. Camacho, que hasta ahora era el responsable de las redes sociales del grupo parlamentario panista en el Senado mexicano, ha confirmado su despido en Twitter: “La vida, la libertad, la familia, la patria, la propiedad privada y la democracia se defienden al precio que sea. Uno nunca debe arrepentirse de hacer lo correcto.”
En el encuentro, que tuvo lugar el jueves pasado, legisladores mexicanos del PAN firmaron la denominada Carta de Madrid, apoyada por el líder de Vox, destinada a frenar el avance del “comunismo” en las naciones de la “Iberosfera”.
La carta, compartida en las redes sociales de “Senadores del PAN”, es impulsada por la Fundación Disenso que lidera Abascal, que ha usado regularmente el concepto de “Iberosfera”. Según la formación de extrema derecha, se trata de “una comunidad de naciones libres con más de 700 millones de personas que comparten una herencia cultural y cuentan con un gran potencial económico y político”.
La reunión fue “a título personal”
El Comité Ejecutivo Nacional del conservador Partido Acción Nacional aseguró el pasado viernes que el acto de varios senadores con el líder del partido español de ultraderecha Vox, fue “a título personal” y afirmó que su principal socio español es el Partido Popular (PP).
“Somos un partido político inspirado en el humanismo político y que siempre ha defendido los derechos humanos, el Estado de derecho, las libertades públicas, la separación de poderes y la democracia representativa”, explicó el PAN en un comunicado.
En este sentido, dijo que estos “valores” están hoy “amenazados” por el Gobierno mexicano, que “aspira a construir un régimen autoritario”.
“Acción Nacional defiende esos principios también en el ámbito internacional. En España nuestro socio institucional es el Partido Popular, ambos formamos parte de la Internacional Demócrata de Centro (IDC)”, indicó.
Sobre la reunión del pasado jueves, que ha causado mucha polémica en México, explicaron que el encuentro que “sostuvieron algunos senadores del PAN con representantes de otro partido fue a título personal, en uso de su libertad”.
Sin embargo, la reunión con Abascal se difundió a través de los canales oficiales de comunicación de la bancada del PAN en el Senado.
“Lamentamos las interpretaciones equivocadas que se hayan podido hacer a este evento en donde no se suscribió ningún acuerdo político, sino un texto donde se manifestaba la disposición individual de trabajar en la defensa del Estado de derecho, el imperio de la ley o la separación de poderes”, entre otros.
“Casi fascistas”
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, opinó el pasado viernes duramente sobre esta reunión. “Hasta ayer vinieron unos extremistas de España, del Vox. Se unieron con el PAN, porque son lo mismo. Nada más que simulaban los del PAN y otros que eran demócratas. Y no, son conservadores y ultraconservadores, casi fascistas”, apuntó el mandatario en su conferencia matutina. Esto suscitó una respuesta por parte de Abascal: “Ninguna declaración de quienes se abrazan a tiranos y protegen a narcos va a impedir nuestra causa a favor de la libertad, los derechos y la prosperidad de las naciones”.
Finalmente, este lunes el presidente mexicano ha afirmado que México es un “país libre” en el que no se “veta” a nadie y ha dejado abierta la puerta a una nueva visita al país de Abascal.
“México es un país libre. Esto también lo digo para que si el señor de Vox, (Santiago) Abascal, quiere venir de nuevo, lo puede hacer. Están abiertas las puertas de nuestro país, siempre son bienvenidos. Todos los extranjeros, aunque sean opositores, no tenemos nada de qué avergonzarnos”, ha subrayado López Obrador.