Grecia fue la primera en proponerlo. España lo apoyó rápidamente. Pero la idea sigue bloqueada en el seno de la Unión Europea por la oposición, principalmente, de Francia, Alemania y los países del Benelux. Sin embargo, tres de los cuatro países del grupo de Visegrado ya han arrancado con la idea en vísperas de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE de este jueves y viernes. Una reunión que debería concluir con algún acuerdo sobre la agilización de la autorización de vacunas y medidas de coordinación contra la COVID-19 –incluidos los pasillos verdes para el transporte de mercancías– y recomendar que, “de momento”, sólo haya “viajes no esenciales” ante “las nuevas variantes que inquietan por su difusión y su efecto en la salud”.
En efecto, Polonia anunciaba este miércoles por la tarde que, a partir del 27 de febrero, aplicará cuarentenas a las personas que lleguen de la República Checa o Eslovaquia.... Salvo que presenten un PCR negativo o un certificado de haber sido completamente vacunados contra la COVID-19.
“Yo no veo a España dispuesta a ir por libre en esto”, decía una fuente diplomática europea este miércoles. Sin embargo, fuentes de Moncloa reconocen que, si bien “la intención es tomar decisiones coordinadas”, la idea del certificado “es fundamental para la movilidad” y, por tanto, el turismo; y no se cierran “a nada”.
Mientras eso llega, Grecia, otro país muy dependiente del turismo (20% del PIB) y que fue el primero en proponer formalmente un modelo de certificado de vacunación que sirviera para viajar sin necesidad de test y cuarentenas, está llegando a acuerdos bilaterales con otros países para agilizar la movilidad de las personas ya vacunadas.
“No descartamos acuerdos como el de Grecia con otros países”, explican fuentes del Ministerio de Exteriores español: “El debate está muy verde y estos corredores no van a entrar en vigor hasta dentro de un par de meses. Queremos explotar todas las posibilidades, pero no descartamos nada. Nuestro énfasis son los acuerdos amplios y multilaterales, en lo que contamos con el apoyo de Israel, Dinamarca, Suecia, Islandia...”
En efecto, Grecia y Chipre acaban de anunciar que permitirán a los ciudadanos de Israel con certificados de vacunación viajar entre los países sin obstáculos en un posible primer paso hacia la normalización del turismo durante la próxima fase de la pandemia. La perspectiva de que las personas puedan moverse libremente en la era del coronavirus ha dado un salto con este acuerdo que centró la visita a Jerusalén del primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis. Después de firmar el acuerdo con su homólogo israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que acuerdos similares pronto podrían estar a la vista. “Espero que lo que hacemos con Israel sea una prueba de lo que podemos hacer con otros países”, dijo Mitsotakis.
Un día antes, el 14 de febrero, el presidente chipriota, Nicos Anastasiades, había hecho el mismo viaje a Israel para cerrar el mismo acuerdo, que se espera entre en vigor el 1 de abril. Al igual que Grecia, la economía de la isla mediterránea depende en gran medida del turismo.
Es más, según publica The Guardian, Grecia está en conversaciones “técnicas” con el Reino Unido para permitir que los británicos que porten un pasaporte de vacunas viajen a sus plazas turísticas a partir de mayo a pesar de las preocupaciones en Bruselas y otras capitales de la UE. Haris Theoharis, el ministro de turismo del país, dijo que esperaba “cuadrar” con la hoja de ruta de Boris Johnson para permitir que los británicos viajen, pero se negó a concretar si Grecia se desmarcaría de Bruselas para establecer el plan.