Dalia Grybauskaité ha sido la más madrugadora. La presidenta lituana, conocida por su disposición a no andarse con rodeos ha sido clara a su llegada a Bruselas. ¿Cómo consiguieron convencer a España? “Suele haber... dejen que bromee, trucos... Prometimos prometer... Y solemos cumplir con las promesas”, ha afirmado a la entrada de la cumbre de los 27 que debe aprobar el acuerdo de retirada de Reino Unido de la UE y la declaración política sobre la relación futura.
Lo que la presidenta lituana ha calificado este domingo de “trucos”, es lo que España ha logrado para levantar su veto a la cumbre del Brexit: una declaración complementaria de los 27 en la línea defendida por España –y en las instrucciones dadas al negociador, Michel Barnier, que se perdieron en las negociaciones, en el “túnel diplomático”– y aclarando el artículo 184 y respaldada por otra del Reino Unido.
Son dos declaraciones anexas, complementarias, al margen del acuerdo de retirada, fuera de la declaración política sobre la relación futura. Pero, quizá, ya no se podía conseguir otra cosa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lo ha calificado de “triple blindaje”: “España logra un triple blindaje histórico con el que puede abordar definitivamente con el Reino Unido el futuro de Gibraltar durante los próximos años. Con este triple blindaje se refuerza significativamente lo establecido en anteriores etapas, con las orientaciones del Consejo Europeo aprobadas en el año 2017”.
El aval jurídico de lo acordado está sujeto a discusión. No tiene el rango del acuerdo de retirada firmado por todos, pero el hecho de que lo refrende Londres y que comprometa a los 27 supone una vía de escape para España antes de que todo saltara por los aires.