Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, han acordado este martes crear una zona de seguridad en el noreste de Siria que entrará en vigor a medianoche de este miércoles.
“Empezando la medianoche del 23 de octubre, la policía militar rusa y guardias fronterizos sirios entrarán en el lado sirio de la frontera turco-sira, fuera de la zona de la Operación Manantial de Paz, para facilitar la retirada de elementos de las Unidades de Protección Popular (YPG) y sus armas”, consta en el acuerdo firmado hoy por los dos líderes en la ciudad rusa de Sochi. Las milicias kurdosirias tendrán que retirarse a 30 kilómetros desde la frontera y toda la operación “debe finalizar en 150 horas”, de acuerdo con el memorando.
“Todos los terroristas de las Unidades de Protección Popular (YPG) serán llevados fuera de la zona”, ha precisado Erdogan en una comparecencia conjunta con Putin. Después “patrullaremos una zona de 10 kilómetros con nuestras tropas”, ha indicado, en referencia a Turquía y Rusia.
El presidente turco ha añadido que ambos países “tomarán cualquier medida necesaria” para prevenir que “los terroristas entren en la zona”. Sostuvo también que mediante este acuerdo, Rusia y Turquía empiezan “un nuevo periodo” en sus esfuerzos por conseguir una solución pacífica al conflicto sirio.
No obstante, el acuerdo recalca que en este contexto se mantiene el status-quo en la actual zona de la operación militar turca contra las milicias kurdosirias entre Tal Abiad y Ras al-Ain en una profundidad de 32 kilómetros.
Por su parte, Putin ha dicho que el acuerdo -alcanzado tras casi siete horas de negociaciones- “es muy importante y ayudará a resolver la muy tensa situación que vemos actualmente en la frontera turca”.
Las SDF aseguran que se han retirado de la zona
Según ha explicado a Efe un portavoz militar de las Fuerzas Democráticas de Siria (SDF), “se han retirado de las zonas ubicadas entre Ras al-Ain y Tal Abiad”. Las SDF, una alianza armada liderada por kurdos, afirman que se han retirado de la franja fronteriza, a dos horas de que expire la tregua pactada entre EEUU y Turquía, que exigía su salida de la zona.
“El primer paso fue la retirada en Ras al Ain, luego vino la segunda etapa, que fue la retirada de la ciudad de Tal Abiad y los alrededores emplazados en las zonas fronterizas”, señaló el portavoz por teléfono.
La denominada “zona de seguridad” es una franja de unos 30 kilómetros de ancho por 480 kilómetros de largo en el norte de Siria de la que Turquía quiere sacar a las milicias kurdosirias para ubicar a unos dos millones de refugiados árabes sirios, algo que los kurdos consideran una “limpieza étnica”.
Rusia, principal aliado de Damasco, ha desplegado a sus tropas en el territorio que controlaban anteriormente los kurdosirios en virtud de un acuerdo militar pactado la semana pasada en el que las unidades leales al presidente sirio, Bashar al Asad, ayudarían a los kurdos a recuperar las áreas perdidas.