“Ucrania va a ganar la guerra”. Es el mensaje que Pedro Sánchez ha dejado en el Parlamento de ese país, donde ha pronunciado un discurso en su visita con motivo del arranque de la presidencia española del Consejo de la UE, que comienza este sábado. Más allá del simbolismo, la visita ha servido para lanzar un mensaje de apoyo al gobierno de Volodímir Zelenski en su camino hacia la UE y también hacia la OTAN. El presidente ucraniano reclama que en la próxima cumbre que los aliados van a celebrar en Vilnius (Lituania) en julio le llegue una “señal” para la futura integración de Ucrania en la alianza atlántica cuando acabe la guerra.
En pleno debate sobre cómo cómo garantizar la seguridad de Ucrania en el medio y largo plazo teniendo en cuenta que la entrada en la OTAN no está planificada en un horizonte próximo, Sánchez ha apostado por dar un paso intermedio. “La agresión a Ucrania nos ha demostrado que hay que defenderlos eficazmente. No sólo con palabras, sino con hechos. Por lo tanto, tendremos que replantearnos el marco de seguridad para garantizar que Ucrania pueda vivir libre de agresiones o intimidaciones”, ha explicado Sánchez, que se ha mostrado partidario de “potenciar la participación política de Ucrania mediante la creación de un Consejo OTAN-Ucrania, en el que ya no será un invitado, sino un miembro, un miembro de pleno derecho”. “También estamos a favor de reforzar la cooperación práctica, para seguir adaptando su sector de defensa a las normas de la OTAN”, ha agregado.
Zelenski ha dejado claro que sólo la entrada en la OTAN le da un paraguas de protección frente a Rusia dado que un ataque a un aliado supone una agresión al conjunto de la alianza, según el artículo 5. “Para nosotros es importante ser miembros de la OTAN para tener las garantías de seguridad que necesitamos. Las garantías de seguridad no son lo mismo, hay que entenderlo”, ha afirmado en una rueda de prensa junto a Sánchez.
Zelenski también ha reclamado celeridad a la UE para la incorporación de Ucrania. Tras haber recibido el estatus de candidato en tiempo récord, quiere que las negociaciones se abran formalmente este año, pero es una fecha que nadie le garantiza por ahora. Primero tiene que llegar la evaluación de la Comisión Europea en octubre y, a partir de ahí, los 27 tendrán que decidir si abren las negociaciones.
“Que el primer día de la presidencia del semestre en el que se van a conocer los avances de Ucrania esté aquí demuestra un compromiso político inequívoco claro por parte de las instituciones europeas”, ha señalado Sánchez junto al presidente ucraniano. “El pueblo ucraniano ha elegido el camino europeo. Ustedes son europeos”, les había dicho antes a los parlamentarios ucranianos.
También ha deslizado que la cumbre UE-Celac que se celebrará en Bruselas a mediados de julio servirá para que Zelenski aproxima posiciones con líderes latinoamericanos que han manifestado divergencias respecto al bloque comunitario ante la guerra, como el brasileño Lula da Silva. “Son buenas oportunidades para que Zelenski hable con estos líderes y sera una buena oportunidad para que desde Europa expliquemos a nuestros aliados la necesidad de continuar con ese apoyo de esa región”, ha señalado el presidente en la rueda de prensa.
En su intervención anterior ante el Parlamento, había dejado claro que es el plan de paz de Ucrania el que avalan los socios europeos frente a propuestas como la de China. “Sólo Ucrania puede fijar las condiciones y los plazos de las negociaciones de paz. Otros países y regiones proponen planes de paz. Su participación es muy apreciada, pero, al mismo tiempo, no podemos aceptarlos por completo. Se trata de una guerra de agresión, con un agresor y una víctima. No se les puede tratar por igual. E ignorar las reglas no debe recompensarse de ninguna manera. Por eso apoyamos la fórmula de paz del presidente Zelenski, que es respetuosa con el Derecho Internacional y la Carta de la ONU”, ha declarado.
“Apoyaremos a Ucrania independientemente del precio a pagar”
El presidente ha felicitado a los ucranianos por los avances que han realizado hasta ahora -la evaluación preliminar es agridulce, no obstante, porque Bruselas sólo le da el visto bueno a dos de los siete requisitos que le ha marcado- y les ha animado a seguir con las reformas, que ha asegurado que son buenas por sí mismas para mejorar la economía o atraer inversiones. “Os garantizarán el acceso a la UE, que es más que el mercado único más grande del mundo, es una comunidad de valores”, ha aseverado Sánchez: “Merece la pena el esfuerzo”. “Lo que ocurra en ucrania marcará los debates europeos en el futuro y por eso estoy aquí”, ha reconocido.
“Hay dos batallas: una en el campo de batalla y otra en las mentes, porque esta es una batalla de ideas y esa el pueblo ucraniano ya la ha ganado”, ha expresado el jefe del Ejecutivo, que se ha mostrado convencido de que pronto se verá una “Ucrania que renace de sus cenizas”. “Luchan por la paz la prosperidad para sus hijos y todos los soldados ucranianos los saben. Los militares rusos luchan con miedo, serán castigados si no lo hacen”, ha expresado Sánchez, que se ha referido a la rebelión que el fin de semana pasada protagonizaron los mercenarios de Wagner. Esa situación ha abierto un rayo de esperanza para el ejército ucraniano, aunque la debilidad de Vladímir Putin inquieta también en Europa, especialmente en los países del este. “Si una de las partes muestra debilidad es porque enfrente hay alguien que muestra lo contrario: determinación. Y es lo que veo aquí: determinación, fortaleza y valentía”, ha agregado.
Sánchez ha anunciado un nuevo paquete de ayudas de 55 millones de euros para la reconstrucción del país: “Estamos y estaremos con ustedes durante todo el tiempo que sea necesario. Apoyaremos a Ucrania independientemente del precio que haya que pagar por ello”. También ha apuntado al envío de otros cuatro tanques Leopard y un hospital de campaña con capacidad quirúrgica.
Pero Zelenski ha reclamado más velocidad a los aliados en el envío de armamento y, sobre todo, en el caso de los cazas. También ha insistido en que la UE debería incluir a la empresa nuclear Rosatom en las sanciones ante la amenaza que ha ha asegurado que existe sobre una voladura de la misma. No obstante, Hungría siempre ha anticipado el bloqueo del castigo a la energía nuclear rusa.
Feijóo promete lealtad y luego cuestiona el papel en la UE
Las palabras de Sánchez se producen en el primer día de la presidencia española del Consejo de la UE, que tendrá un final incierto debido a la batalla electoral. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha creado un grupo de trabajo por si le toca coger el testigo tras las elecciones, ha expresado a través de Twitter su “lealtad y compromiso” con el semestre. Tras esas palabras, ha cuestionado de nuevo el papel del Gobierno en Europa. “A los españoles nos toman de broma en la UE”, ha asegurado en referencia a las discrepancias del Gobierno respecto a la cuestión militar.
También la vicepresidenta segunda y candidata de Sumar, Yolanda Díaz, se ha comprometido a trabajar por el “pilar social y el pacto verde” durante la presidencia y, en un momento en el que la derecha está recuperando el poder en Europa, ha apuntado a la necesidad de que España continúe en la senda progresista.