Qué se sabe de la filtración de la llamada de altos mandos alemanes sobre Ucrania y qué puede pasar ahora

El pasado viernes salió a la luz una extraordinaria filtración de una llamada por Internet en la que participaron el jefe de la fuerza aérea alemana y tres subordinados, en la que hablaban de si sería posible persuadir al canciller Olaf Scholz, reacio a aprobar la entrega de misiles de largo alcance Taurus a Ucrania, y si la munición podría hacer estallar el estratégico puente de Kerch que conecta Rusia con la Crimea ocupada.

¿Cómo llegó la filtración al dominio público?

La propagandista del Kremlin Margarita Simonyan, redactora jefe de la cadena de televisión internacional RT, difundió entusiasmada una grabación de 38 minutos en las redes sociales el pasado viernes. Un día después, se ofreció a ayudar a Olaf Scholz a llegar al fondo de la filtración, después de que el canciller anunciara una investigación para averiguar cómo ha llegado al dominio público una grabación de la conversación de alto secreto, aceptada por Berlín como auténtica.

La naturaleza pública de la filtración representa un cambio con respecto a operaciones anteriores de Moscú, en las que la información pirateada ha pasado por intermediarios no rusos como WikiLeaks o se ha volcado en Internet. Es significativo que se produzca en un momento de creciente atención a la continua negativa de Scholz a dar Taurus a Ucrania, un misil con un alcance operativo de poco más de 480 kilómetros en comparación con el misil de largo alcance más eficaz de Kiev, el franco-británico Scalp/Storm Shadow, con un alcance equivalente a la mitad.

“En las entrañas de la Bundeswehr [Ejército alemán] se están discutiendo de forma sustantiva y concreta planes de ataque contra territorio ruso”, dijo este lunes el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. “¡Muerte a los ocupantes germano-nazis!”, dijo el menos comedido expresidente Dmitri Medvédev.

¿Hasta qué punto es esto embarazoso para Berlín?

Mucho. Se supone que las conversaciones secretas entre jefes militares no deben salir a la luz. El diálogo implica al teniente general Ingo Gerhartz, jefe de la Luftwaffe, y a tres subordinados hablando de las capacidades de los Taurus antes de una reunión de media hora que el jefe de la fuerza aérea había programado con el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, para “profundizar” en los Taurus y quizás hacer cambiar de opinión a Scholz.

Sin embargo, se ha dicho que la conversación no tuvo lugar a través de un sistema de seguridad militar, sino a través del software comercial de videoconferencias Webex. Uno de los participantes llamó desde Singapur, lo que podría haber sido el punto débil.

Pistorius ha dicho este martes que la conversación pudo ser grabada por un “error individual” de una persona que se conectó sin las cautelas necesarias, al tiempo que asegura que los sistemas de comunicación de Defensa “no están ni se han visto comprometidos”. Así, los datos de un participante en Singapur se filtraron a través de una conexión no autorizada, es decir, abierta, ya sea el teléfono móvil o la conexión inalámbrica del hotel en el que se encontraba.

En cualquier caso, la llamada fue interceptada y grabada, o se obtuvo una grabación y se entregó a RT, y parte de la conversación fue potencialmente embarazosa para Reino Unido.

¿Qué dicen los militares alemanes sobre Reino Unido en Ucrania?

Gerhartz y su equipo conversan sobre hasta dónde podría llegar Alemania en su apoyo con Taurus, y si Berlín necesitaría proporcionar información precisa sobre objetivos y programación de los misiles que estaría dispuesta a dar. Hacen referencia a Francia y, en particular, a Reino Unido, y señalan que en el caso de este último parece haber soldados sobre el terreno que ayudan en la recepción y asesoran a los ucranianos en las decisiones de bombardeo.

“Cuando se trata de planificar misiones, sé cómo lo hacen los ingleses”, dice el comandante alemán a sus subordinados en la llamada. Además de trabajar con asesores en su país, los británicos “también tienen algunas personas sobre el terreno, ellos lo hacen, los franceses no”. Ha sido muy poco frecuente hablar de la presencia de tropas de Reino Unido en Ucrania.

¿Hay tropas británicas en Ucrania de manera secreta? ¿Qué importancia tiene?

El Ministerio de Defensa británico no ha querido confirmar específicamente si las tropas británicas están ayudando a Ucrania con el uso de misiles Storm Shadow, aunque ha habido rumores de que es así desde hace algún tiempo. Si es cierto, y todavía están presentes después de la filtración, es probable que el número sea relativamente pequeño, aunque cualquier ayuda prestada para apuntar a objetivos es un paso más hacia la participación en el conflicto.

Hace una semana, el propio Scholz se refirió a la presencia de tropas británicas en Ucrania ayudando con el “control de objetivos” y dijo que no podía aceptar algo similar para Alemania, ya fuera dentro o fuera del país, porque consideraba que corría el riesgo de convertir a Berlín en un “participante en la guerra”. Es probable que Rusia ya estuviera al corriente de la presencia británica, tanto por las declaraciones y filtraciones de Gran Bretaña como por sus propios servicios de inteligencia, y todavía no ha provocado una escalada significativa por parte de Moscú.

Una lectura atenta de las declaraciones parlamentarias muestra que el Reino Unido reabrió su sección de defensa en Ucrania en abril de 2022. Un ministro dijo en julio de 2023 que Gran Bretaña tenía tropas en el país “para apoyar la presencia diplomática del Reino Unido en el país, y nuestra oferta de entrenamiento a las fuerzas armadas de Ucrania”, mientras que las filtraciones han revelado que Reino Unido ha tenido hasta 50 fuerzas especiales en el país y que los Royal Marines han apoyado “operaciones discretas” allí, como el restablecimiento de la embajada británica en Kiev.

¿Y ahora qué?

Antiguos conocedores dicen que creen que el Ministerio de Defensa se sentirá irritado, pero que las filtraciones son demasiado generales para ser perjudiciales. Curiosamente, lo principal que ha hecho Downing Street no ha sido quejarse, sino presionar de nuevo a Scholz. “Reino Unido fue el primer país en suministrar misiles de ataque de precisión de largo alcance a Ucrania, y animamos a nuestros aliados a hacer lo mismo”, ha declarado un portavoz de la oficina del primer ministro.

El principal beneficio para Moscú es tratar de explotar públicamente las filtraciones contra el canciller alemán, que sin embargo seguirá recibiendo presiones occidentales y ucranianas para que done los misiles Taurus, entre otras cosas porque en la llamada filtrada los expertos alemanes dicen que creen que entre 10 y 20 podrían ser capaces de volar el puente de Kerch.