Donald Trump tomará posesión como el presidente estadounidense más impopular de los últimos 40 años. A su entrada a la Casa Blanca, solo 4 de cada 10 americanos tienen una opinión favorable de su nuevo presidente, según las encuestas de Washington Post y la cadena de noticias ABC. La mayoría, un 54% de los ciudadanos de EEUU, tiene una mala valoración de Trump.
Los datos señalan que los seis presidentes anteriores eran mucho más populares que Trump en el momento en el que tomaron posesión. A su llegada a la Casa Blanca en 2008, el 79% tenía una opinión favorable de Obama. Tras la ajustada victoria de George Bush ante Al Gore en 2000, en medio de acusaciones de fraude, el presidente arrancó su mandato con una popularidad del 62%, 20 puntos más que el actual presidente.
El primer presidente afroamericano de la historia de EEUU deja la Casa Blanca con altibajos. La valoración de su labor como presidente ha bajado respecto a como llegó en 2009, pero ha acabado con la mejor nota desde su reelección en 2012, según datos de la empresa demoscópica Gallup.
El auge de la aprobación del trabajo de Obama como presidente en los últimos dos años le llevan a estar entre los inquilinos de la Casa Blanca que mejor han salido del cargo. El 56% de los encuestados tiene hoy buena opinión de su labor como presidente. John Kennedy terminó su presidencia con un 58% de aprobación. El predecesor de Obama, George Bush, con un 34%.
A diferencia de Bush y Reagan, que gozaron de altas tasas de popularidad (por encima del 50%) durante la mayoría de su mandato, Obama mantuvo un índice de aprobación por debajo del 50% durante gran parte de su presidencia. Solo en los meses posteriores a sus dos victorias electorales consiguió que la mayoría de los estadounidenses aprobara su labor.
Una circunstancia que cambió al final de su mandato. Cuando su tiempo en la Casa Blanca se estaba acabando, los norteamericanos han empezado a valorar mejor el legado de Obama.
Tras ocho años como presidente, su legado también se traduce en cómo ha cambiado la opinión de los estadounidenses en algunos temas clave durante su mandato, según datos de distintas empresas demoscópicas obtenidos de la web Pollingreport.com. Cuando llegó, el 49% creía que el matrimonio entre personas del mismo sexo debería ser legal. Casi una década después, y después de que el Tribunal Supremo de EEUU lo legalizara el año pasado, ya el 58% piensa que debería ser legal.
En otros temas clave como la importancia del cambio climático o la opinión sobre el aborto también ha cambiado al visión de la población de EEUU. El Obamacare, que empezó en 2010 con un índice de aprobación del 36%, también ha subido en popularidad llegando hasta el 48% en 2016.
Por el contrario, la Administración de Obama apenas ha cambiado la opinión de los estadounidenses en el tema migratorio y al debate sobre el derecho a la posesión de armas. Las relaciones entre las razas parecen ser el gran escollo para el primer presidente afroamericano de los EEUU. En 2009, el 66% de los encuestados consideraba que las relaciones entre blancos, afroamericanos, asiáticos e hispanos eran generalmente buenas. En 2016, y tras varios escándalos de la policía por su violencia contra personas negras, el porcentaje de encuestados cayó hasta el 44%.