Miles de refugiados están siendo empujados a la frontera polaca por el régimen bielorruso. Ante la escalada de la tensión, la Unión Europea y la OTAN están empezando a tomar decisiones para intentar aplacar los “ataques híbridos” del Gobierno de Alexander Lukashenko. Según la Comisión Europea, hay un grupo de países de origen que están vigilando: “Marruecos, Siria, Irán, Qatar, Suráfrica, Somalia, India, Sri Lanka, Venezuela, así como Rusia, Azerbaiyán, Túnez, Argelia, Libia, Yemen... Estamos mirando la frecuencia de los vuelos, el patrón de vuelos, cuántos vuelos salen, cuántos vuelos regresan, cuál es la ocupación del avión... Estas son todas las cosas a mirar si hay datos disponibles. El régimen de Lukashenko lleva a cabo una operación muy, muy inhumana, inaceptable y realmente ilegal, porque se acercan a estos viajeros potenciales a través de canales aparentemente oficiales, consulados bielorrusos, embajadas bielorrusas, agencias de viajes y otros intermediarios que emiten, por ejemplo, visados, y les informan de que luego se organizará el transporte para que vayas a la frontera”.
“El patrón de cómo el régimen opera está haciendo que estas personas crean que pueden continuar más allá en la UE”, afirma un portavoz comunitario, Peter Stano: “Esto es parte de la actitud inhumana y gangsteril del régimen de Lukashenko, que está mintiendo a la gente. Está abusando de las personas, engañándolas y llevándolas a Bielorrusia con la falsa promesa de tener una entrada fácil en la UE, mientras que después al llegar a Bielorrusia las empujan a la frontera y las obligan a entrar ilegalmente en la Unión Europea. Lukashenko está tomando acciones que no solo están en contra de cualquier enfoque civilizado y en contra de todos los principios de buenas relaciones de vecindad. Son ilegales. Están en violación del derecho humanitario. Violan las obligaciones internacionales de Bielorrusia. Este comportamiento irracional e irresponsable es una de las señales de que realmente siente la presión por las sanciones que introdujimos y seguimos introduciendo para detener todo lo que está haciendo contra la UE y contra su propia población”.
Así, los 27 han decidido este martes endurecer las condiciones para los visados a dirigentes del régimen bielorruso y la Alianza Atlántica califica de “inaceptable” el “ataque híbrido” desde Minsk. “La suspensión abarca las disposiciones que eximen de la presentación de pruebas documentales, regulan la expedición de visados para entradas múltiples y reducen las tasas de tramitación de visados que se aplican a los funcionarios del régimen bielorruso”, afirma el Consejo de la UE: “La decisión no afectará a los ciudadanos bielorrusos de a pie, que seguirán disfrutando de las mismas ventajas que tenían hasta ahora en virtud del acuerdo sobre la facilitación de la expedición de visados”.
De acuerdo con los 27, “las perturbaciones políticas que tuvieron lugar en Bielorrusia y las medidas restrictivas adoptadas por la UE, Bielorrusia comenzó en junio pasado a organizar vuelos y viajes para facilitar el tránsito de migrantes hacia la UE, primero a Lituania y posteriormente a Letonia y Polonia. Estas acciones vulneran los principios fundamentales con arreglo a los cuales se celebró el acuerdo sobre la facilitación de la expedición de visados y van en contra de los intereses de la UE”.
Y, según Reuters, los 27 embajadores de la UE están preparados para acordar formalmente que el creciente número de migrantes a lo largo de la frontera de Bielorrusia con Polonia equivale a una “guerra híbrida” y puede servir como base legal sobre la cual aprobar sanciones: se pueden apuntar 30 nombres, incluida Belavia, la aeorlínea nacional bielorrusa.
Rusia, principal valedor internacional de Lukashenko, sin embargo, defiende que la raíz del problema es la política que los países de la OTAN y la Unión Europea han practicado en relación a Oriente Medio y el norte de África, y el intento de imponer su propia interpretación de los valores democráticos.
“No se puede olvidar dónde empezó todo y de quién es la culpa de lo que está ocurriendo ahora. Por eso, la principal responsabilidad del arreglo de la crisis migratoria reside ahora en aquellos que crearon las condiciones para el surgimiento de este problema”, señaló el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, informa Efe.
Así, los presidentes de Rusia y de Bielorrusia, Vladímir Putin y Alexandr Lukashenko, han hablado este martes de la crisis, según informó el Kremlin: “Los presidentes (...) intercambiaron opiniones sobre la situación con los refugiados en las fronteras bielorrusa-polaca y bielorrusa-lituana”.
Una columna de varios miles de inmigrantes, en su mayoría kurdos de Siria e Irak, se dirigió el lunes por la mañana por una autopista hasta un puesto fronterizo con Polonia en la región de Grodno.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, por su parte, ha calificado de “inaceptable” el “ataque híbrido” desde Minsk, y se ha solidarizado con el Gobierno polaco, con cuyo presidente, Adrzej Duda, ha hablado este martes.
Polonia, la UE y EEUU han llamado al presidente bielorruso “a cesar de inmediato el uso político de la migración irregular como arma política”, y acusan a Lukashenko de provocar la crisis migratoria en represalia por su apoyo a la oposición bielorrusa en el exilio, ha alertado a la Unión Europea de una “catástrofe humanitaria” debido a la concentración de inmigrantes ante la llegada del invierno.
“Bielorrusia debe dejar de poner en peligro la vida de las personas”, ha dicho la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: “La instrumentalización de los migrantes con fines políticos por parte de Bielorrusia es inaceptable. Las autoridades bielorrusas deben comprender que presionar a la Unión Europea de esta manera a través de la instrumentalización cínica de los migrantes no les ayudará a lograr sus propósitos”.
Von der Leyen ha explicado que ha hablado con el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, la primera ministra lituana, Ingrida ŠimonytÄ, y el primer ministro letón, Arturs KrišjÄnis KariÅš, “para expresar la solidaridad de la UE y discutir con ellos las medidas que la UE puede tomar para apoyarlos en sus esfuerzos por hacer frente a esta crisis”.
A continuación, la presidenta del Ejecutivo comunitario ha pedido a los Estados miembros que “aprueben finalmente el régimen de sanciones ampliado a las autoridades bielorrusas responsables de este ataque híbrido”. Además, el vicepresidente Margaritis Schinas, en coordinación con el Alto Representante, Josep Borrell, “viajará en los próximos días a los principales países de origen y de tránsito para asegurarse de que actúan para evitar que sus propios nacionales caigan en la trampa tendida por las autoridades bielorrusas”. Y ha añadido: “La UE estudiará cómo sancionar, incluso mediante la inclusión en listas negras, a las aerolíneas de terceros países que participan activamente en la trata de personas”.
Finalmente, “la Comisión Europea explorará con la ONU y sus agencias especializadas cómo evitar que se desarrolle una crisis humana y garantizar que los migrantes puedan ser devueltos de manera segura a su país de origen, con el apoyo de sus autoridades nacionales”.
La presidenta de los socialistas en el Parlamento Europeo, Iratxe García, también ha expresado su condena por la “utilización de personas que buscan asilo”, que son “víctimas”.
El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, también ha llamado a las autoridades polacas a “ofrecer ayuda las personas vulnerables para evitar una escalada mayor”.