Managua, 10 dic (EFE).- La Delegación de la Unión Europea (UE) y los embajadores de Europa en Managua recordaron este viernes los compromisos adquiridos en la Declaración Universal de Derechos Humanos, firmada en 1948 por 48 países, incluyendo Nicaragua, cuyo Gobierno ha sido señalado por organismos internacionales de no respetar los derechos de las personas.
En un video divulgado por la UE, que mostró a los diplomáticos reunidos para conmemorar el Día de los Derechos Humanos, estos reflexionaron sobre el papel que jugó Nicaragua para el establecimiento de “un mundo en que los seres humanos sean liberados del temor y de la miseria” al firmar la Declaración, y cómo las personas pueden contribuir a que las personas “puedan vivir con dignidad y gozar de sus derechos básicos y libertades fundamentales”.
“Nicaragua fue uno de estos 48 miembros de verdad muy visionarios. Entonces es por eso que hoy día podemos disfrutar de la libertad de palabras y de la libertad de creencias. Hoy más que nunca todos los países firmantes tienen que honrar y respetar cada artículo de la Declaración”, dijo la embajadora de la UE en Managua, Bettina Muscheidt.
Muscheidt invitó a sus colegas a reflexionar sobre el aporte que cada habitante, en cualquier lugar, puede brindar para garantizar el cumplimiento de los derechos humanos y de las libertades.
“Yo creo que antes que todo tenemos que denunciar los abusos de los derechos humanos donde ocurran y apoyar a las víctimas”, respondió el embajador de Alemania en Nicaragua Christoph Bundscherer.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en 2018 al menos 355 personas murieron en ataques armados del Gobierno del presidente Daniel Ortega contra manifestantes antigubernamentales en Nicaragua, y más de 150 han sido arrestados por criticar al exguerrillero, quien insiste a la comunidad internacional en que no se meta en sus “asuntos internos”.
“Tenemos que asegurarnos que los derechos humanos sean efectivamente universales, que sean respetados en el mundo entero, no pueden ser considerados como un tema de política interior, porque todos aquellos que se comprometieron a respetarlos tienen que cumplir con su palabra”, refirió el embajador de Francia en Nicaragua, Brieuc Pont.
RESPALDO A ORGANIZACIONES
En un país donde unas 66 mujeres han muerto a causa de la violencia machista en 2021 y se han denunciado los asesinatos de al menos 50 líderes indígenas desde mediados de la década pasada, los representantes de España y Luxemburgo abogaron por ambos sectores.
“Como parte de nuestros principios, debemos seguir exigiendo que se deje de maltratar física, sexual, o psicológicamente a las mujeres”, dijo el encargado de Negocios de la Embajada de España en Nicaragua, Jaime Ramos.
“También es sumamente importante proteger los derechos de los pueblos indígenas y afrodescendientes, y en general luchar contra cualquier tipo de discriminación y desigualdad”, comentó el encargado de Negocios de la embajada de Luxemburgo en Nicaragua, Joe Geisbusch.
El embajador de Italia en Nicaragua, Amedeo Trambajolo, afirmó estar “totalmente de acuerdo, por supuesto, con los colegas, y al final creo que todo eso podemos hacerlo, debemos hacerlo respaldando a las organizaciones internacionales y de la sociedad civil comprometidas en la defensa de los derechos humanos”.
La alianza global Civicus Monitor, que monitorea y compara las libertades cívicas a nivel mundial, ubicó recientemente a Nicaragua, que recién anunció su retiro de la Organización de los Estados Americanos (OEA), como país “cerrado”, la calificación más baja en el cumplimiento de los derechos humanos, misma que comparte con China, con la que estableció relaciones en la víspera.
Ayer mismo la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, esposa de Ortega, criticó a los defensores humanitarios, a quienes acusó de “violadores” de los derechos humanos.