Mike Hooken, el eurodiputado del partido ultranacionalista británico Ukip acusado de haber dado un puñetazo al candidato a liderar la formación que sufrió un desvanecimiento en la Eurocámara, niega haberle golpeado. Ambos eurodiputados discrepan sobre la forma en la que sucedieron los hechos que acabaron con la hospitalización de Steven Woolfe tras el altercado.
Según ha explicado Woolfe en una entrevista al Daily Mail, Hoooken, con el que había discutido previamente, le pegó un puñetazo y cayó golpeándose la cabeza. Media hora después comenzó a encontrarse mal y perdió el conocimiento. La otra parte implicada ha negado los hechos tras hacerse públicas las acusaciones.
Según la versión de Woolfe, todo comenzó en la mañana del jueves durante una reunión del partido en la que el principal candidato a dirigir el Ukip hizo un comentario que no sentó bien entre el resto de eurodiputados de la formación. “Mike (Hookem) estaba visiblemente alterado”, ha subrayado.
Entonces, Woolfe invitó a su compañero a abandonar la sala y a solucionar sus diferencias de “hombre a hombre”. “Entendió mal el mensaje, vino hacia mí y me golpeó”, ha dicho.
“No estaba buscando pelea. Le pedí que habláramos fuera porque el ambiente de la reunión se estaba caldeando y estábamos molestando a la gente, pero Mike leyó el mensaje de forma errónea. Un incidente inesperado”, reiteraba Woolfe. “Mike se acercó y me dio un puñetazo. Después caí sobre el marco de la puerta, golpeándome la cabeza, y quedé conmocionado”.
Sin embargo, el presunto agresor Mike Hookem ha negado los hechos. “No le golpeé, ni le vi golpearse la cabeza”, ha explicado en declaraciones a The Guardian. Un testigo cercano a Hookem ha insistido en que se trató de un mero altercado verbal: “Tras salir de la reunión, Steven lanzó el primer golpe. Pero se tropezó y cayó al suelo. Fue todo una chiquillada. Nada prueba que se golpeara la cabeza”.
Tras el incidente, los eurodiputados regresaron a la reunión junto con el resto de compañeros. Ambos volvieron a ponerse sus chaquetas, que habían dejado en la sala al abandonar la reunión. Dos horas después, Woolfe se derrumbó y fue trasladado al hospital, donde ha permanecido ingresado hasta el día de hoy sin más síntomas que “entumecimiento” en la parte izquierda de su cuerpo.
Un eurodiputado
Se abrirá una investigación
Nigel Farage, el líder provisional del partido después de que su sucesora, Diana James, dejase el cargo tan solo 18 días después de su elección, ha anunciado la apertura de una investigación para esclarecer los hechos. Otro miembro del partido, Paul Oakden, ha discutido la idoneidad de la medida, al no haber testigos independientes que den cuenta del enfrentamiento.
Oakden también ha apostado por que ambos eurodiputados superen este “desafortunado” incidente para poder continuar con la elección del nuevo dirigente del UKIP. Sin embargo, algunos miembros del partido dudan de la idoneidad de Woolfe para el cargo tras el incidente, entre ellas una de las candidatas que concurre por el liderazgo del partido Lisa Duffy.
“He hablado con varios miembros del UKIP en las últimas horas. Todos ellos están avergonzados sobre lo qué está pasando en el partido”, ha explicado Duffy en declaraciones a la BBC. “¿Queremos un líder que se vea envuelto en altercados, o queremos uno racional que lidie con los problemas de una forma apropiada? La violencia no es el camino más indicado para ello”, ha concluido.