El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha comparado este sábado el Brexit con la invasión rusa a Ucrania. “El instinto de la gente de este país, como la gente de Ucrania, es elegir la libertad”, y un ejemplo de esa libertad es el referéndum celebrado por el que se decidió la salida de Inglaterra de la Unión Europea.
En un discurso en el congreso del Partido Conservador en la ciudad inglesa de Blackpool, Johnson ha hablado de la situación de Ucrania tras la invasión de las fuerzas rusas. Según recoge The Guardian, la comparación ha traído diferentes críticas para el dirigente británico, como la del Tory Lord Barwell, que ha señalado que precisamente Ucrania está tratando de unirse a la UE. “Votar en un referéndum libre y justo no es de ninguna manera comparable con arriesgar la vida para defender su país contra una invasión”, ha criticado Barwell.
También el líder demócrata Ed Davey ha afeado en Twitter a Johnson sus comentarios: “Comparar un referéndum con mujeres y niños que huyen de las bombas de Putin es un insulto para todos los ucranianos”. Davey ha calificado al primer ministro británico de “vergüenza nacional”.
El ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ha insistido en la renuncia de Ucrania a entrar en la OTAN como requisito para firmar un acuerdo de paz y acabar con la guerra en el país.
Lavrov ha indicado en declaraciones recogidas por la agencia rusa TASS que para que se logre el acuerdo de paz, Kiev debe firmar los “documentos sobre los problemas de seguridad, el estatus neutral de Ucrania y, por supuesto, la consolidación en norma del actual marco legislativo relativo al idioma ruso, la educación rusa y los medios de comunicación rusos”. Unos requisitos que el ministro ha calificado como “absolutamente mínimos”.
“Las obligaciones legales no son algo que nuestros colegas occidentales respeten en estos días”, siguió el ministro, quien también ha criticado que Occidente “ha tirado por la borda la presunción de inocencia, la sagrada propiedad privada y otros muchos 'pilares' sobre los que se asientan los 'valores liberales'”.
El ayuntamiento de Mariúpol ha denunciado este sábado a través de un comunicado que las fuerzas rusas están obligando a los residentes de la ciudad a abandonar Ucrania para ir a Rusia.
Según señala el ayuntamiento a través de un mensaje difundido en su canal de Telegram, la semana pasada “varios miles de residentes de Mariúpol fueron deportados a Rusia”. Debido a los “constantes bombardeos”, las Fuerzas Armadas de Ucrania se retiraron de los lugares concurridos, algo que “fue utilizado por el agresor”.
“Se sabe que los residentes de Mariúpol capturados fueron llevados a campos de filtración, donde los ocupantes revisaron los teléfonos y documentos personales. Después de la inspección, algunos residentes fueron redirigidos a ciudades remotas en Rusia, mientras que se desconoce el destino del resto”, recoge el texto.
El alcalde de Mariúpol, Vadym Boychenko, ha criticado este hecho y lo ha comparado con los “horribles eventos de la Segunda Guerra Mundial”, cuando “los nazis capturaban a la fuerza a las personas”. “Es difícil imaginar que en el siglo XXI se deporte a la fuerza a otro país”, ha añadido el alcalde de la ciudad ucraniana.
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha comparado este sábado el Brexit con la invasión rusa a Ucrania. “El instinto de la gente de este país, como la gente de Ucrania, es elegir la libertad”, y un ejemplo de esa libertad es el referéndum celebrado por el que se decidió la salida de Inglaterra de la Unión Europea.
En un discurso en el congreso del Partido Conservador en la ciudad inglesa de Blackpool, Johnson ha hablado de la situación de Ucrania tras la invasión de las fuerzas rusas. Según recoge The Guardian, la comparación ha traído diferentes críticas para el dirigente británico, como la del Tory Lord Barwell, que ha señalado que precisamente Ucrania está tratando de unirse a la UE. “Votar en un referéndum libre y justo no es de ninguna manera comparable con arriesgar la vida para defender su país contra una invasión”, ha criticado Barwell.
También el líder demócrata Ed Davey ha afeado en Twitter a Johnson sus comentarios: “Comparar un referéndum con mujeres y niños que huyen de las bombas de Putin es un insulto para todos los ucranianos”. Davey ha calificado al primer ministro británico de “vergüenza nacional”.
Las autoridades ucranianas han admitido este sábado que no tienen posibilidades de reforzar la defensa de la ciudad de Mariúpol, fuertemente atacada por los rusos.
Olexij Arestowytsch, asesor del presidente Volodímir Zelensky, ha dicho que las fuerzas más cercanas están a más de 100 kilómetros de distancia o ya involucradas en luchas con el enemigo. “Actualmente no hay una solución militar para Mariúpol. No es solo mi opinión, es también la opinión de los militares”, ha reconocido.
Durante el sábado ha habido nuevos ataque rusos a Mariúpol y una importante siderúrgica fue casi totalmente destruida. “Están muriendo ancianos y niños. La ciudad está destruida, es como su hubiera sido borrada del mapa”, ha dicho el policía Michaíl Wershnin en un mensaje de vídeo difundido por medios de comunicación.
El Gobierno en Kiev ha anunciado que se han abierto diez corredores humanitarios para la evacuación de la población civil de las zonas de guerra. Uno de ellos va de Mariúpol hacia Zaporiyia.
Por EFE.
Una nueva imagen de satélite de la empresa privada estadounidense Maxar Technologies muestra el estado de destrucción en el que se encuentra el teatro de Mariúpol que las fuerzas rusas bombardearon el pasado miércoles.
Las imágenes iniciales de Maxar mostraban la palabra “niño” en caracteres rusos (деÑи) de gran tamaño escrita en el suelo fuera del teatro, que servía de refugio para cientos de personas. Aún se desconoce si hay víctimas, ya que continúan las labores de rescate entre los escombros.
El ejército ruso ha destruido casi por completo la planta metalúrgica de Azovstal en la ciudad de Mariúpol, una de las más grandes de Europa, según informaciones del Ministerio de Interior ucraniano.
“Según nuestras informaciones, hemos perdido ese gigante económico. Una de las plantas metalúrgicas de Europa ha sido sistemáticamente destruida”, ha dicho el ministro de Interior, Vadym Denysenko.
“Es imaginable que (el presidente ruso Vladímir) Putin haya dado personalmente la orden para destruir toda la ciudad. El objetivo de Putin no es desmilitarizar Ucrania sino desindustrializarla y que tengamos que volver a construir nuestras plantas en las próximas décadas”, agregó.
Según informó el Ayuntamiento de la ciudad del sur de Ucrania el pasado jueves, el 80% de las viviendas ya han sido destruidas y la situación en la zona es “crítica”.
Por EFE.
La ONU ha confirmado este sábado 847 civiles muertos y 1.399 heridos en la invasión rusa de Ucrania. De los fallecidos, 21 de ellos son niños y siete son niñas, además de otros 36 pendientes de identificación.
Según el último balance actualizado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos publicado este sábado, “desde las 4.00 horas del 24 de febrero, cuando comenzó el ataque armado de la Federación Rusa contra Ucrania, hasta las 0.00 horas del 18 de marzo”, el organismo de la ONU ha registrado un total de 2.246 víctimas civiles en Ucrania.
La mayoría de estas bajas, según apunta Naciones Unidas, se deben al uso de armas explosivas de “amplia área de impacto”, como los ataques aéreos. Sin embargo, las cifras reales serían “considerablemente más altas”, pero aún no se pueden contabilizar por completo por la falta de información de algunos lugares especialmente afectados por los ataques rusos.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha advertido este sábado de una “nueva etapa de intimidación” si la invasión rusa triunfa. Johnson ha dicho que es “vital” que “fracase”, al considerar que si el presidente de Rusia, Vladímir Putin, resultara “victorioso”, este “no se parará” solo en Ucrania.
“Cada día que pasa de la resistencia heroica de Ucrania, queda claro que Putin ha cometido un error catastrófico (...) ¿Por qué decidió invadir un país totalmente inocente?”, se ha preguntado el primer ministro en un discurso de clausura en un Congreso del Partido Conservador en Blackpool.
Johnson tildó la invasión como “el principio de una nueva era de intimidación en Europa del este” y consideró que el mundo se encuentra ante un “punto de inflexión”, un momento “donde hay que elegir entre libertad y opresión”. “En la Rusia de Putin te encarcelan 15 años solo por llamar invasión a una invasión, y si protestas contra Putin en unas elecciones, te envenenan o te pegan un tiro”, aseguró.
Según señaló, la invasión de las tropas rusas ha sido motivada por el “miedo” de Putin a terminar con un país “libre y democrático” como su vecino. El dirigente conservador señaló que Putin “realmente no creía que Ucrania iba a unirse a la OTAN pronto, sabía perfectamente bien que no había planes para poner misiles en suelo ucraniano”.
“Creo que tenía miedo de Ucrania porque en Ucrania tienen una prensa libre y elecciones libres” y eso amenazaba su manera de dirigir el país.
Con información de EFE.
Más de 2.000 personas han conseguido salir este sábado de la ciudad de Mariúpol hasta Zaporiyia, según informa el secretario del Ayuntamiento de Zaporiyia, Anatoliy Kurtev.
Este sábado por la tarde llegaron a la ciudad otros 363 automóviles con 2.128 residentes de Mariúpol, de los que 648 son niños. Según ha indicado Kurtev, los desplazados recibieron ayuda como “alimentos, medicinas” y “un techo sobre sus cabezas”. “Las personas también reciben asistencia médica y psicológica”, ha añadido.
La vice primera ministra de Ucrania, Irina Vereshchuk, ha confirmado la apertura de diez nuevos corredores humanitarios este sábado para la evacuación de civiles en zonas de guerra.
Esta mañana Vereshchuk ya había anunciado que esperaban poder abrir estos nuevos corredores, pero ahora se ha confirmado. Uno de ellos saldrá de la ciudad de Mariúpol, donde todavía permanecen cientos de personas entre los escombros del teatro destruido por las tropas rusas. De ahí, los desplazados podrán moverse hasta Berdiansk, donde serán recogidos por autobuses.
También se abrirán cuatro corredores en la región de Lugansk y diferentes rutas en las localidades cercanas a Kiev.